Por Agencias
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La ciudad de Danlí, en la zona este de Honduras y frontera con Nicaragua, se ha convertido en el epicentro de los migrantes extranjeros que a diario llegan a Honduras en su camino para llegar a Estados Unidos.
Según dijo el delegado del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos en Honduras (Conadeh) en Danlí, William Rolando Alvarado, a diario están ingresando a esta ciudad un promedio de 2.500 migrantes procedentes de diversos países y esto tiene abarrotadas algunas plazas públicas.
Según dijo el funcionario “Danlí está teniendo serios problemas por el colapso de la población migrante en tránsito”.
Ya se volvió normal ver como las plazas públicas o pequeños parques son abarrotadas con tiendas de campaña o covachas construidas de plástico por los migrantes, añadió el defensor de los derechos humanos.
Gabriela Camacho, quien viaja desde Venezuela, dice que todo el trayecto ha tenido que pasarla en la intemperie junto a sus tres hijas, su hermana y un sobrino que la acompañan por la falta de recursos económicos.
“Mi núcleo familiar, mi hermana, mi sobrino y mis hijas siempre hemos dormido en la calle”, dijo la mujer de 25 años de edad.
Añadió que para poder viajar tienen que vivir de la caridad de las personas y de algún dinero que le mandan familiares que están en Estados Unidos.
Según cifras del Instituto Nacional de Migración de Honduras (INM), del 2 de enero al 9 de agosto de este año ingresaron por Honduras unos 203.000 migrantes extranjeros, de estos 34.134 son menores de edad.
Elisa Ríos, de la Organización Médicos Sin Fronteras en la ciudad de Danlí y quien atiende a los migrantes, asegura que desde hace dos meses están viendo un mayor flujo sobre todo en núcleos familiares.
Agregó que las atenciones médicas y psicológicas a esta población se han incrementado casi en un 500%. Asegura que, de 60 diarias, pasó hasta unas 350 y “la demanda de atención en la población infantil, esto nos evidencia que hay un mayor número de núcleos familiares ingresando por la zona”.
En las calles de la ciudad de Danlí se ven a migrantes tratando de conseguir dinero con las ventas de dulces junto a sus hijos, algo que les permita obtener recursos para poder seguir su camino.
Joel Suárez que viaja desde Venezuela dijo que llegó Honduras hace 15 días sin dinero y agregó: “Uno lo que le toca es comprar un paquetito de chupetas para obtener poco a poco ir reuniendo los pasajitos e ir avanzando poco a poco”.
Yarzuris Hernández, una ciudadana venezolana que viaja junto a sus dos hijos y su esposo, comentó que en todo el trayecto han tenido que estar vendiendo dulces en la calle y seguirán en eso hasta que logren llegar a su destino final.
Además dijo que: “Ya hemos pasado siete países, nos faltan tres, dos y medio pues que viene siendo Guatemala y México y ya de allí bueno Estados Unidos”.
Todos estos migrantes para llegar a Honduras tuvieron que cruzar la selva del Darién y un informe de prensa de la Organización de las Naciones Unidas divulgado el 2s de agosto revela que más de 250.000 migrantes y refugiados cruzaron esa jungla de enero a julio de este año.
Para los migrantes pasar este trayecto es una de las peores pesadillas. Yoimer Madrid, por ejemplo, dice que cruzar ese lugar no es algo normal, pero que se tienen que arriesgar pese a los peligros que se encuentran en el camino.
“En esa selva hay muertos, no todos salen con vida, otros se fracturan o se parten un pie», aseguró.
Isamar Hernández, también de nacionalidad venezolana, recomendó no cruzar esa selva a los que están pensando hacerlo. “Yo le aconsejo a todo el mundo de corazón que jamás no por envidia que jamás se vengan por esa selva, jamás vi de todo, vi como siete muertos, eso es lo peor que puede haber”.
La jefa de la patrulla fronteriza del sector del Valle del Río Grande, en Texas, Gloria Chávez, aseguró en una conferencia virtual a periodistas hondureños que el mayor número de personas detenidas por esa frontera sur en lo que va del año son de nacionalidad hondureña, seguidos de ciudadanos de Venezuela, México, Guatemala y Nicaragua.
“Nosotros en el Valle del Río Grande ahí en el sur de Texas ya hemos detenido más de 250.000 personas”, señaló la funcionaria estadounidense.
Chávez agregó que también la patrulla fronteriza en lo que va del año logró encontrar y rescatar unos 44.000 menores de edad entre ellos dijo niños de brazos que eran cargados por sus hermanitos mayores.
La funcionaria hizo un llamado a las personas que están pensando realizar el viaje sin documentos a Estados Unidos que no lo hagan y que desde sus países puedan ingresar a las páginas web habilitadas por el gobierno y hacer una cita que les permita poder iniciar el proceso de inmigración y así evitar poner en peligro sus vidas.
