Por Agencias
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Una vez más Emiliano Martínez se convirtió en el héroe de una Argentina que careció de frialdad para dar la estocada final y dejar revivir a los Países Bajos.
El conjunto europeo estaba abajo en el marcador 2-0 y en los últimos 17 minutos de tiempo regular cayó el descuento de 2-1, el empate llegaría 11 minutos de reposición para obligar al alargue con el 2-2.
El partido se fue al alargue y los goles no cayeron, por lo que se tuvo que definir con la tanda de los penales y es ahí cuando el show de Martínez inició.
El portero detuvo loss disparos de Virgil van Dijk y Steven Berghuis para ganar 4-3 desde los 12 pasos.
El sueño de semifinales comenzó con la anotación a los 34 minutos de Nahuel Molina, quien en 25 apariciones con la selección Argentina tuvo su primer gol en quizá el momento más importante de su carrera.
Sin embargo, la jugada de antología, con pase milimétrico incluido, fue de Lionel Messi entre cuatro jugadores que facilitó que el jugador quedara frente a frente a Noppert y abrir el marcador parcial de 1-0.
Messi inició el partido como punta, lo que señalaba que Argentina arriesgaría más con el capitán como atacante, aunque él fue parte fundamental en la creación de jugadas.
La anotación de Messi llegó a los 73 minutos tras una falta dentro del área y él se encargó de cobrar el penalti que les acercaba un poco más a las semifinales con un aparente 2-0 contundente.
Aunque era la Argentina que proponía, Países Bajos se mantuvo tranquilo y siguió trabajando, hasta que lograron el descuento a los 83 minutos por medio de Woug Weghorst, quien había entrado de sustituto unos minutos atrás.
Weghosrt se convirtió en un dolor de cabeza para los argentinos, que al ver que solo faltaba muy poco para acabar el partido, bajó de ritmo, algo que los europeos les hicieron pagar.
Argentina cometió faltas muy cerca del área grande protegida por Emiliano Martínez, quien nada pudo hacer para evitar el empate que llegó a los 11 minutos de descuento en un tiro libre.
Teun Koopmeiners se encargó de cobrar el tiro libre y en lo que pareció ser una jugada preparada, el mediocampista dio un pase en corto que recibió Weghorst y este forcejeando con un defensa anotó el de la igualada cuando todo parecía que terminaría a favor de los sudamericanos.
El partido se fue a tiempos extras. A la Argentina le costó trabajo encontrar nuevamente la portería rival, ya que desde su anotación no había conseguido un tiro directo al marco.
El ingreso de Ángel Di María le dio otro respiro a la selección y permitió quitar la presión de Países Bajos y obligar a los penales en donde Martínez brilló nuevamente con luz propia.
Argentina enfrenta a Croacia en la semifinal del torneo el próximo 13 de diciembre, desde el Lusail Iconic Stadium.
