Que difícil es pasar 9 meses con un grupo maravilloso de niños, reír, jugar, aprender, formar una familia y ahora tener que decir adiós… y repetir la historia cada año.
Tengo 26 años de maestra y usted pensaría que estoy acostumbrada a las despedidas cada fin de año escolar. No es así.
Cada año es difícil, se siente un dolor en el pecho, el corazón apachurrado.
Se me va el sueño, es más, hasta el hambre se me quita al pensar que ya no volveré a tener a mis estudiantes en el salón.
¿Y por qué no?… lloramos el último día de clases, no tienen nada de malo llorar y expresar sentimientos.
Sentimientos encontrados ya que estoy feliz con la llegada del verano, desactivar mi alarma, levantarme tarde, y pasar tiempo con mis hijos es verdaderamente maravilloso.
Por otra parte, me harán mucha falta mis estudiantes, mis niñ@s, como yo le digo. Extrañaré mi salón de clase, mi segundo hogar.
Los primeros días en casa, sin ir a la escuela, son muy difíciles, despierto a la misma hora, 5:40 a.m., me la paso mirando el reloj, pensando que es hora de lectura, hora de matemáticas, etc.
También me preocupa el bienestar de mis alumn@s cuando no están en la escuela. Estudios muestran que durante el verano, los casos de abuso infantil aumentan.
Los padres no les tienen paciencia, les gritan, les pegan, muchos niñ@s se quedan solos en casa mientras que los padres trabajan.
Los hermanos mayores los cuidan pero sabemos que en realidad, el celular es de la niñera.
Los estudiantes no comen bien, ya no tienen acceso al almuerzo nutritivo y balanceado de la escuela, comen muchas golosinas y chucherías en casa.
Es recomendable que los padres compren fruta, verduras, bebidas no azucaradas, los niñ@s comen lo que encuentran en la cocina.
Les recuerdo que existe un programa de almuerzo gratis durante el verano, infórmese sobre las locaciones en su ciudad.
Por las tardes, después de trabajar, asegúrese de llevar a sus hijos al parque o la playa. Saquelos a pasear.
Los niñ@s deben estar activos durante el verano, es probable que estén pegados por muchas horas en el celular, así que tome control del celular. No es bueno para los niños.
Infórmese sobre campamentos y programas de verano, son muy divertidos y educacionales.
No se preocupe por el costo, existen becas y ayuda financiera.
El fin del ciclo escolar trae grandes cambios para todos, maestros, estudiantes y padres deben ajustarse a otra rutina y el cambio no es fácil.
Evite decir a l@s niñ@s que estorban, que enfadan en casa y que prefiere que se vayan a la escuela.
Tenga paciencia, disfrute a sus hij@s. Crecen pronto y esos momentos no volverán.
Yo me despido por unas semanas, regresaré al principio del próximo año escolar para seguir aprendiendo juntos a ser mejores padres.
Feliz verano.