Por Agencias
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Los cuatro estadounidenses secuestrados el pasado viernes en Matamoros eran amigos: habían viajado desde Carolina del Sur a la ciudad mexicana para que una de las integrantes del grupo, Latavia «Tay» Washington McGee, se sometiera a un procedimiento médico.
Dos de las víctimas del secuestro murieron, mientras que otras dos sobrevivieron y ya se encuentran en Estados Unidos.
Esto es lo que sabemos de ellos:
Latavia «Tay» Washington McGee y Eric Williams, los supervivientes del secuestro en Matamoros
Latavia «Tay» Washington McGee, de 33 años, fue una de las dos sobrevivientes del secuestro, hallada sin heridas.
Había viajado a México para hacerse un procedimiento médico acompañada por sus tres amigos.
Esta no era la primera vez que Washington McGee viajaba a México para someterse a un procedimiento de este tipo, dijo su madre, Barbara Burgess. Hace unos años, según Burgess, su hija se sometió a una intervención quirúrgica en México, que se ha convertido en uno de los principales destinos del potencialmente riesgoso «turismo médico», atrayendo a estadounidenses que pueden estar buscando una atención más económica o tratamientos que no están disponibles en Estados Unidos.
La joven es madre de seis hijos.
Eric Williams es el otro sobreviviente del secuestro. Está casado con Michelle Williams, con quien tiene un hijo de 11 años.
Su esposa contó que habló con su marido por teléfono en la mañana de este martes cuando lo estaban transportando a un hospital en Texas, donde lo operaron por sus heridas.
A Williams le dispararon dos veces en una pierna y una tercera vez en la otra, según el relato de su esposa, quien explicó que se espera que pueda caminar luego de la intervención.
Él consideraba a los dos estadounidenses que murieron tras secuestro como sus «hermanos», dijo la mujer.
Zindell Brown y Shaeed Woodard, las víctimas mortales
Brown y Woodard fueron hallados muertos en el lugar de los hechos, dijo un funcionario estadounidense familiarizado con la investigación en curso. Se espera que sus restos sean repatriados a Estados Unidos después de que un médico forense mexicano complete un examen forense para determinar las causas de su muerte, añadió la fuente.
Una fuente de la Fiscalía General de México dijo que se espera que la repatriación se realice este jueves.
Según un funcionario estadounidense, el plan es transportar los restos en un vehículo de una funeraria de México a otra funeraria en Brownsville, Texas. Una vez que los cuerpos estén en Estados Unidos se realizará en algún punto una segunda autopsia.
El grupo de estadounidenses desaparecidos creció en Carolina del Sur y eran muy unidos, dijo la hermana de Brown, Zalandria Brown. Agregó que ella y su hermano también eran muy cercanos.