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Resumen internacional

Por Redacción
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Los fiscales de la Ciudad de México tomaron la medida extrema e inusual de hacer que los infantes de marina los acompañaran a través de las fronteras estatales y arrestaran a Uriel Carmona, el Fiscal General del estado vecino de Morelos, para llevárselo de regreso a la capital.

La escena del viernes pasado en Cuernavaca, la capital del estado de Morelos, era como una telenovela, que involucraba a decenas de agentes fuertemente armados, escándalos políticos, una ex estrella del fútbol nacional y narcotraficantes, y donde uno de los empleados de Carmona transmitió en vivo en Facebook para filmar el arresto.

Los fiscales de la Ciudad de México señalaron que Carmona fue arrestado por cargos de obstruir la investigación sobre el asesinato en 2022 de una mujer de la Ciudad de México, cuyo cuerpo fue encontrado tirado justo al otro lado de la frontera estatal en Morelos.

Carmona, sin embargo, dice que es víctima de una conspiración política que involucra al exastro del fútbol Cuauhtémoc Blanco, quien actualmente es Gobernador del estado de Morelos.

Carmona señaló que el presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó su arresto porque Carmona estaba investigando los presuntos vínculos de Blanco con narcotraficantes.

Blanco, un aliado político de López Obrador, ha negado cualquier vínculo con narcotraficantes luego de que apareciera una foto de hace 3 años que lo muestra posando con tres hombres identificados como líderes de bandas de narcotraficantes locales.

Blanco indicó en 2022 que en ese momento no sabía quiénes eran los hombres y que asumió que solo eran fanáticos del fútbol, ​​con quienes posa frecuentemente en fotos.

En una entrevista con la estación de radio MVS momentos antes de ser arrestado en su casa, Carmona aseguró que fue víctima de una persecución política y culpó a la alcaldesa de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ahora candidata presidencial primaria por el partido Morena de López Obrador, y al propio presidente. .

“Esta es una campaña en mi contra para proteger al gobernador de Morelos Cuauhtémoc Blanco, porque los detectives a mi mando han abierto más de 10 investigaciones en su contra por varios delitos graves, como su probable vínculo con el crimen organizado”, enfatizó Carmona.

La Corte Suprema dictaminó que Carmona no podía ser arrestado sin antes ser acusado, pero la oficina de López Obrador emitió un comunicado en julio rechazando el fallo, alegando que no se aplicaba a cargos como obstrucción a la justicia.

Sheinbaum, quien renunció como alcaldesa de la Ciudad de México para competir por la nominación presidencial del partido gobernante en 2024, rechazó las acusaciones de Carmona y dijo que “este no es un tema político, es un tema de justicia”.

En 2022, Sheinbaum acusó a Carmona de estropear intencionalmente la autopsia de Ariadna López, de 27 años, para encubrir a su asesino.

Sheinbaum alegó que Carmona tenía vínculos con el presunto asesino, aunque se negó a describir sus supuestos vínculos.

Carmona dijo en ese momento que un examen forense estatal mostró que López se atragantó con su propio vómito como resultado de la intoxicación.

Una segunda autopsia realizada por expertos de la Ciudad de México encontró “varias lesiones causadas por golpes” en el cuerpo de López y enumeró la causa de la muerte como “traumatismos múltiples”.

COLOMBIA

Durante años, el hombre conocido como Otoniel fue visto como uno de los capos de la droga más peligrosos del mundo, el escurridizo jefe de un cartel y un grupo paramilitar con un control empapado de sangre en gran parte del norte de Colombia.

El martes, Dairo Antonio Úsuga dijo que estaba “aceptando la responsabilidad por los crímenes que he cometido” al ser sentenciado a 45 años de prisión en EE.UU.

“Pido disculpas a los gobiernos de Estados Unidos y de Colombia y a las víctimas de los crímenes que he cometido”, dijo Úsuga, de 51 años, a través de un intérprete judicial.

El exlíder del notorio Clan del Golfo se declaró culpable en enero de cargos de narcotráfico de alto nivel, admitió que supervisó el contrabando de toneladas de cocaína con destino a Estados Unidos y reconoció que “hubo mucha violencia”.

Estados Unidos acordó no buscar una cadena perpetua para que lo extraditen de Colombia, donde enfrenta la posibilidad de un mayor enjuiciamiento si sobrevive el tiempo suficiente para ser liberado en los Estados Unidos.

El fiscal general estadounidense a cargo, Merrick Garland, dijo en un comunicado que la sentencia de 45 años mostraba que la nación responsabilizaría a los capos criminales, “sin importar dónde estén y sin importar cuánto tiempo tome”, por dañar a los estadounidenses.

Úsuga y sus abogados buscaron presentarlo como un producto de los problemas de su tierra natal, las penurias rurales remotas, rodeado por la guerra de guerrillas, reclutado a los 16 años y endurecido por décadas de pérdida de amigos, compañeros soldados y seres queridos a causa de la violencia.

“Habiendo nacido en una región de gran conflicto, crecí dentro de este conflicto”, dijo en la Corte, y aconsejó a los jóvenes que “no sigan el camino que yo he tomado”.

“Deberíamos dejar los conflictos armados en el pasado”, agregó.

Pero la juez federal de distrito Dora Irizarry, invocando su propia infancia en un complejo de viviendas del sur del Bronx que aseguró estaba plagado de violencia y tráfico de drogas, le recriminó al narco que el ambiente no era una excusa.

“Las personas que crecen en estas comunidades, que tienen la voluntad y el deseo, se las arreglan para salir de esto”, enfatizó, y le dijo a Úsuga que él tenía posibilidades “de dejar esa vida atrás, y tú no”.

La violencia se ha cobrado la vida de más de 1 millón de personas y ha dejado a millones más desplazados por la fuerza, desaparecidos y dañados de otro modo, según datos de la Unidad de Víctimas del país. 

El gobierno ha buscado firmar acuerdos de paz con los grupos armados pero ha luchado por consolidar la paz en un conflicto complejo arraigado en la pobreza rural y la falta de oportunidades.