Por Agencias
[email protected]
Ni Estados Unidos ni la OTAN tuvieron participación alguna en la breve insurrección del Grupo Wagner en Rusia, afirmó el presidente estadounidense Joe Biden al señalar que el levantamiento y el desafío que plantea al poder de Vladímir Putin son “una lucha dentro del sistema ruso”.
Biden y los aliados de Estados Unidos —incluyendo otras naciones que apoyan a Ucrania en su respuesta a la invasión rusa— mostraron una clara determinación de que se les viera al margen de los muchos problemas de Putin con el motín, preocupados de que el mandatario ruso pueda usar acusaciones de implicación occidental en la revuelta para aglutinar a los rusos en su defensa.
En el transcurso de un fin de semana tumultuoso en Rusia, diplomáticos estadounidenses estuvieron en contacto con sus homólogos en Moscú para hacer hincapié en que el gobierno estadounidense consideraba el asunto como algo interno de Rusia y del que Estados Unidos era meramente un espectador, dijo un funcionario estadounidense familiarizado con esas conversaciones.
El funcionario, que habló bajo condición de anonimato, dijo que los diplomáticos estadounidenses también subrayaron a Moscú que esperaban que Rusia garantizara la seguridad de la embajada de Estados Unidos en Moscú y de los ciudadanos estadounidenses detenidos en Rusia.
Biden señaló que mantuvo una videollamada con sus aliados durante el fin de semana y que todos estaban decididos a no dar a Putin “ninguna excusa para culpar de esto a Occidente”.
“Dejamos claro que no estábamos implicados. No tuvimos nada que ver”, aseveró Biden. “Esto fue parte de una lucha dentro del sistema ruso”.
Michael McFaul, exembajador estadounidense en Rusia, dijo que anteriormente Putin ha alegado la participación clandestina de Estados Unidos en varios acontecimientos —incluyendo levantamientos democráticos en antiguos países exsoviéticos y protestas por la democracia dentro de Rusia— como una forma de disminuir el apoyo público entre los rusos a esos desafíos al sistema ruso.
Estados Unidos y la OTAN “no quieren que se les atribuya la apariencia de intentar desestabilizar a Putin”, reiteró McFaul.
Biden también habló con el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy durante el fin de semana y dijo que tenía la intención de volver a conversar con él a última hora del lunes o el martes temprano.
“Le dije que, pase lo que pase en Rusia, permítanme repetirlo, pase lo que pase en Rusia, en Estados Unidos seguirá apoyando la defensa y la soberanía de Ucrania y su integridad territorial”.