El jueves pasado se estrenó “Black Widow”, la 24º película en el Universo cinematográfico Marvel, el ansiado film en solitario protagonizado por Scarlett Johansson como ‘Natasha Romanoff’, la icónica ‘Viuda Negra’ de “Los Vengadores”.
Hacía años que Marvel quería hacer esta historia sobre el origen del personaje y, de hecho, estaba previsto que se estrenase en mayo de 2020, pero debido a la pandemia se retrasó tres veces.
“Black Widow” inaugura la fase 4 y nos muestra a ‘Romanoff’ huyendo en plan “El Fugitivo”, obligándola a enfrentarse a su misterioso pasado.
La película está dirigida por la australiana de Nueva Gales, Cate Shortland, quien irrumpió en el mundo del cine en 2004 con su primer largometraje “Somersault”.
Originalmente, “Black Widow” fue ofrecida a la oscarizada Chloé Zhao, directora de “Nomadland”, que la rechazó para dirigir “Eternals”, que se estrenará en noviembre.
Lo que está claro es que Marvel quería a una directora para esta película de mujeres, no solo por ‘Romanoff’, sino también por su hermana ‘Yelena’ (interpretada maravillosamente por Florence Puig, conocida por sus papeles en “Midsommar” y “Mujercitas”).
Así como por sus padres, ‘Melina’, la siempre fantástica Rachel Weisz, y ‘Alexei’, interprertado por el carismático David Harbour.
Shortland ha hecho un muy buen trabajo como directora, sobre todo a la hora de acercarse a la intimidad emocional de los personajes, consiguiendo unas interpretaciones realmente conmovedoras y llenas de verdad, y con el uso de poderosos y sostenidos primeros planos potencia la emotividad del film dentro del espectáculo que es “Black Widow”.
El film arranca en un pequeño pueblo de Ohio en 1995, en el que las jóvenes ‘Natasha’ y ‘Yelena’ viven una vida tranquila con lo que parece ser una familia típicamente estadounidense.
Un día, sin embargo, al llegar a casa del trabajo ‘Alexei’ les da la terrible noticia de que tienen que irse de inmediato, dejando atrás los sueños de vivir una vida feliz en Estados Unidos.
Así, se dan a la fuga en medio de la noche y terminan escapando de la policía in extremis con una vieja avioneta que acaba pilotando la joven ‘Romanoff’ hacia Cuba.
Una vez allí, al ver que sus padres no son realmente sus padres sino espías rusos, las jóvenes chicas son llevadas a la Sala Roja, para entrenar duramente y llegar a convertirse en infalibles máquinas de matar.
Tras unos créditos al ritmo de una fantástica versión de Smells Like Teen Spirit de Nirvana, “Black Widow” se sitúa cronológicamente después de “Capitán América: Civil War”.
Ahora ‘Romanoff’ es una fugitiva del gobierno por violar los Acuerdos de Sokovia.
Mientras tanto, ‘Belova’ sigue trabajando para la Sala Roja y después de matar a una Viuda entra en contacto con el Polvo Rojo, una sustancia que elimina el control que tiene la Sala Roja sobre ella.
Al descubrir esto, envía el antídoto al piso franco de Romanoff, escondida ahora en Noruega, y debido a esto es atacada por ‘Taskmaster’, un temible soldado con una terrorífica máscara de calavera que copia los movimientos de sus adversarios y posee una fuerza brutal, forzando otra espectacular escena de acción.
‘Romanoff’ y ‘Belova’ se reencuentran en Budapest, donde son atacadas por un grupo de “Viudas Negras” en una increíble secuencia que mezcla a la perfección el estilo de las luchas de “Bourne”, las persecuciones urbanas de “Misión Imposible” y la tensión de “Terminator 2”, el film de ciencia ficción favorito de Scarlett Johansson.
‘Romanoff’ descubre que la Sala Roja sigue activa y que su líder, el malvado ‘Dreykov’ (Ray Winstone) sigue vivo.
Ahora las dos hermanas tendrán que reunir a la familia para juntos encontrar a ‘Dreykov’ y su Sala Roja, situada en una espectacular base en medio del aire desde donde controla a miles de jóvenes “Viudas Negras”.
El balance entre los espectaculares set pieces de acción; la fuga de la cárcel dónde se encuentra ‘Alexei’ o el clímax de la película, que es un auténtico festival visual (aunque la lucha final con ‘Taskmaster’ en el aire podría haber durado más), junto con los tiernos y emotivos momentos en familia (como cuando van a la humilde granja en la que vive ‘Melina’ y estalla el drama familiar a mitad de la cena con su reencuentro.
Lo anterior, hacen de “Black Widow” un film sólido y al que tampoco le faltan momentos cómicos, como el gag recurrente que le dice ‘Belova’ a ‘Romanoff’ sobre cómo siempre fuerza la pose cuando aparece en escena.
Y aunque la protagonista indiscutible de “Black Widow” sea Johansson, la película está protagonizada de forma coral por los 4 personajes principales, que tienen una química brutal en escena.
Es importante que aquellos que quieran ir hilando el nuevo universo de personajes que Marvel está planteando en esta fase 4 se queden para la escena post créditos.
En cuanto a recaudación, en su primer fin de semana de estreno “Black Widow” ha conseguido $80 millones de dólares en los cines, $60 millones en streaming de pago en Disney+ y $78 millones en la taquilla internacional, con un total de $218 millones de dólares a nivel mundial.
Se convierte, pues, en el mejor estreno en Estados Unidos desde que empezó la pandemia.
Puntuación 4 de 5 estrellas.