Por Redacción
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Chicago se prepara para enfrentar una de las nevadas más intensas en años, impulsada por una poderosa masa de aire ártico que se expande sobre gran parte de Estados Unidos. El Servicio Meteorológico Nacional advirtió que el fenómeno, conocido como “nieve por efecto lago”, podría dejar acumulaciones excepcionales y generar condiciones de viaje peligrosas desde la noche del domingo hasta el mediodía del lunes.
Los meteorólogos prevén que una franja estrecha, pero extremadamente activa, descargue nieve a un ritmo de más de 7,6 centímetros por hora. Si la banda de nieve se mantiene estacionaria, las acumulaciones podrían superar los 30 centímetros antes del mediodía. Las autoridades locales alertaron que las ráfagas de viento, combinadas con temperaturas de hasta -6 grados Celsius, podrían reducir la visibilidad a cero y volver casi imposibles los desplazamientos.
“Estamos ante un evento potencialmente histórico para noviembre”, señaló el Servicio Meteorológico Nacional. “La intensidad de la nevada y la velocidad a la que caerá la nieve podrían superar la capacidad de limpieza de las carreteras, creando condiciones extremadamente peligrosas”.
Una tormenta impulsada por aire ártico
El fenómeno que azota a Chicago está vinculado a la misma masa de aire polar que se extiende rápidamente sobre los dos tercios orientales del país. No se trata de un simple frente frío, sino de una irrupción ártica que podría romper récords de temperatura en múltiples estados.
Para millones de personas al este de las Montañas Rocosas, este lunes marcará la mañana más fría desde la primavera pasada. El aire gélido continuará intensificándose hasta el martes, cuando se esperan temperaturas por debajo del punto de congelación tan al sur como Texas, Luisiana y Florida, y tan al este como los Apalaches.
Atlanta experimentará uno de los descensos térmicos más bruscos: tras registrar una máxima cercana a 21 °C el domingo, apenas alcanzará los 3 °C este lunes. Para el martes por la mañana, las temperaturas podrían caer a -1 °C, el amanecer más frío registrado en noviembre desde 2015.
“Estas son condiciones que esperaríamos a mediados de enero, no en la primera mitad de noviembre”, señaló el meteorólogo David Roth, del Centro de Predicción Meteorológica.
En Alabama, Mississippi, Georgia, Luisiana y Florida podrían romperse récords de temperaturas mínimas este martes. Ciudades como Birmingham, Huntsville, Baton Rouge, Savannah, Tampa y Fort Myers se preparan para amanecer con cifras históricamente bajas.
Las regiones del noreste también sentirán los efectos del aire polar. Washington, D.C., podría registrar -1 °C al amanecer, mientras que Nueva York alcanzaría apenas 4 °C en la tarde del martes. La sensación térmica en ambas ciudades podría rondar los -6 °C. En Chicago, sin embargo, la combinación del aire ártico con las aguas templadas del Lago Michigan está generando una tormenta más inestable y localizada.
Nieve en expansión y alivio temporal
Además de Chicago, la nieve se extenderá a otras regiones del país, aunque con menor intensidad. Las áreas situadas al este de los Grandes Lagos continuarán recibiendo nieve por efecto lago, mientras que las laderas occidentales de los Apalaches centrales podrían acumular varias pulgadas. En las zonas montañosas desde Virginia Occidental hasta el límite entre Carolina del Norte y Tennessee, las acumulaciones podrían alcanzar niveles significativos.
Pese a la magnitud del fenómeno, los meteorólogos ofrecen una nota de alivio: el frío extremo no durará demasiado. Se espera que las temperaturas en el centro del país comiencen a recuperarse el martes, con un retorno gradual al clima otoñal para el miércoles.
“Es un golpe corto pero intenso de aire polar”, explicó Roth. “Después del martes, el patrón atmosférico cambia y las temperaturas deberían estabilizarse”.
Chicago no ha registrado una nevada de 25 centímetros desde enero de 2021, y habría que remontarse a 2015 para encontrar una acumulación similar en noviembre. La mayor nevada en la historia de la ciudad durante este mes fue en 1895, cuando cayeron 30 centímetros. Si las previsiones actuales se cumplen, el evento de este lunes podría igualar o incluso superar ese récord de más de un siglo.
Las autoridades locales instaron a los residentes a evitar desplazamientos innecesarios, abastecerse de alimentos y mantenerse informados sobre las alertas meteorológicas. El Departamento de Transporte de Illinois desplegó más de 400 vehículos para despejar las principales rutas, pero advirtió que la velocidad de la nevada podría rebasar su capacidad de respuesta.
Mientras tanto, las aerolíneas con sede en el aeropuerto O’Hare han comenzado a cancelar y reprogramar vuelos ante el pronóstico de ventiscas y visibilidad nula. El aeropuerto Midway también activó su protocolo de emergencia invernal.
Aunque la tormenta será breve, los expertos advierten que la combinación de nieve intensa y temperaturas bajo cero podría causar apagones, accidentes de tránsito y demoras en el transporte público. Se espera que el sistema se debilite gradualmente hacia la tarde del lunes, dejando un paisaje blanco y gélido como preludio de un invierno que, según los meteorólogos, podría ser más severo de lo habitual.
