EE.UU. Mantiene Suministro de Armas a Israel Tras Avances en Ayuda Humanitaria a Gaza

Por Redacción
[email protected]

La decisión surge luego de una evaluación de las medidas adoptadas por Israel en respuesta a la advertencia de Estados Unidos en octubre sobre la necesidad de mejorar el acceso humanitario en el enclave palestino, devastado por la guerra.

El portavoz del Departamento de Estado, Vedant Patel, explicó que si bien el avance es limitado, consideran que Israel no ha violado la legislación estadounidense que condiciona la asistencia militar a la conformidad con el derecho humanitario internacional. “Aún creemos que Israel puede y debe hacer más, pero no hemos concluido que se haya infringido la ley,” comentó Patel.

La decisión de Washington llega un día después de que el secretario de Estado, Antony Blinken, se reuniera en Washington con el asesor de seguridad nacional israelí, Ron Dermer, para revisar los esfuerzos de Israel en cuanto a la ayuda humanitaria. En octubre, tanto Blinken como el secretario de Defensa, Lloyd Austin, notificaron a Israel que debía permitir un mayor acceso de ayuda humanitaria en Gaza dentro de un plazo de 30 días, que expiró el martes.

La exigencia de Estados Unidos incluía la apertura de un quinto cruce fronterizo para facilitar el ingreso de suministros, permitir a las personas que viven en campamentos de tiendas en la costa mudarse al interior y garantizar la presencia de grupos humanitarios en el norte de Gaza, la zona más golpeada por el conflicto. Además, se solicitó detener las políticas que obstaculizan las operaciones de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA).

Un informe elaborado por ocho organizaciones de ayuda internacionales —incluyendo Care, Mercy Corps y Save the Children— criticó los esfuerzos de Israel. Según el documento, Israel cumplió parcialmente solo cuatro de las 19 medidas establecidas por Estados Unidos, incumpliendo el resto. Las organizaciones señalaron que la situación humanitaria en Gaza sigue deteriorándose, especialmente en el norte, donde la falta de acceso y las restricciones continúan agravando la crisis.

“El deterioro en Gaza es alarmante, especialmente en las áreas del norte donde el acceso humanitario sigue siendo limitado,” señala el informe. “Israel no ha cumplido con los criterios establecidos, y la situación en el terreno es más crítica que hace un mes.”

En respuesta al informe, el ejército israelí anunció el martes la apertura de un quinto cruce en Deir al Balah, que permitirá el flujo de suministros hacia el centro y sur de Gaza. Sin embargo, se reporta que los residentes siguen hacinados en campamentos costeros sin poder trasladarse al interior, y el acceso para los trabajadores humanitarios sigue restringido en la zona norte. Además, Israel aún no ha revertido las leyes que afectan las operaciones de la UNRWA, lo cual fue otro punto clave en las demandas de Estados Unidos.

El ministro de Exteriores de Israel, Gideon Saar, restó importancia a la fecha límite impuesta por Washington y expresó su confianza en que el “problema se resolverá”. Fuentes en Israel indicaron que el descenso en la cantidad de camiones de ayuda se debió en parte a los cierres fronterizos durante festividades judías y la conmemoración del ataque de Hamás en octubre de 2023.

Según cifras del ejército israelí, durante octubre entraron a Gaza en promedio 57 camiones diarios, cifra que aumentó a 81 en la primera semana de noviembre. Sin embargo, la ONU reporta un promedio de solo 37 camiones diarios desde principios de octubre, una cifra significativamente menor a la recomendada por Estados Unidos.

Además de las restricciones en los cruces, el reparto de ayuda humanitaria se ha visto afectado por la inestabilidad en Gaza, incluyendo saqueos y la interferencia de Hamás y grupos delictivos, según un funcionario israelí que habló bajo condición de anonimato. Se estima que, en ciertos días, hasta el 40% de los suministros son interceptados antes de llegar a los civiles.

El ejército israelí también anunció nuevas medidas, como la expansión de una zona humanitaria en la costa y la conexión de una planta desalinizadora en Deir al Balah a la red eléctrica, con el fin de proporcionar agua potable a los refugiados. También se reportó una “entrega táctica” de alimentos y agua en Beit Hanoun, una de las localidades más afectadas en el norte de Gaza.

La guerra, que comenzó en octubre de 2023, ha dejado más de 43,000 muertos en Gaza, de los cuales más de la mitad son mujeres y niños, según autoridades de salud palestinas. Aproximadamente el 90% de la población en Gaza ha sido desplazada, y cientos de miles viven en campamentos sin acceso adecuado a alimentos, agua y saneamiento. La ONU y otras organizaciones internacionales han expresado su preocupación por las condiciones en el enclave y han presionado para que se permita una mayor entrada de ayuda.

Estados Unidos ha enviado miles de millones de dólares en ayuda militar a Israel durante el conflicto y ha defendido a su aliado ante los llamados internacionales a un alto al fuego, mientras continúa exigiendo medidas que faciliten el acceso humanitario. Según cifras oficiales, el suministro de ayuda aumentó en primavera tras la presión de Washington, aunque volvió a caer en octubre.

El expresidente Donald Trump, recientemente reelecto, ha prometido terminar las guerras en Medio Oriente, aunque no ha dado detalles sobre cómo lo hará. Durante su primer mandato, Trump fue un firme aliado de Israel, y se reporta que ha hablado tres veces con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, desde su reelección.

Está previsto que el presidente de Israel, Isaac Herzog, visite la Casa Blanca en los próximos días para reunirse con el presidente Joe Biden, en un momento en que las relaciones bilaterales y la cooperación en defensa se encuentran bajo la mirada de la comunidad internacional.