Por Agencias
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Los precios del petróleo en Estados Unidos cayeron a su nivel más bajo de este año, justo cuando las preocupaciones por la economía eclipsan la inquietud ante las nuevas restricciones impuestas contra la energía de Rusia.
La fuerte caída en los precios del petróleo durante los dos últimos días resulta, en su mayor parte, una buena noticia para los consumidores, pues los costos de la gasolina deberían seguir bajando.
El petróleo estadounidense se desplomó este martes un 3,5%, a los US$ 74,25 el barril, el nivel más bajo desde el 23 de diciembre de 2021.
Así, el petróleo ha caído un 43% desde que alcanzó brevemente los US$ 130 por barril en marzo pasado, en medio de los temores por la invasión rusa de Ucrania.
El crudo Brent, de referencia mundial, también perdió un 4% este martes, situándose en torno a los US$ 79,50 por barril.
La caída del petróleo ocurre después de que Occidente impusiera a Rusia nuevas restricciones que, al menos de momento, no parecen estar descarrilando los mercados energéticos mundiales.
La Unión Europea prohibió este lunes las importaciones marítimas de petróleo ruso, mientras que Occidente impuso un tope de US$ 60 al crudo del país.
Ambas medidas pretenden afectar la capacidad de Moscú para financiar su guerra en Ucrania ––sin perjudicar a los consumidores–– al provocar que Rusia reduzca drásticamente la producción de petróleo.
«El petróleo ruso sigue en el mercado. Por ahora, parece que Rusia está dispuesta a jugar», apuntó Robert Yawger, vicepresidente de futuros del petróleo en Mizuho Securities.
Yawger dijo que «no hay duda» de que los mercados energéticos se sienten aliviados con respecto a que el precio máximo no haya sido significativamente inferior a US$ 60.
Un tope más bajo podría haber persuadido a Rusia de tomar represalias recortando drásticamente la oferta.
«Han conseguido una cifra bastante buena. No queremos matar a la gallina de los huevos de oro, solo limitarla», señaló Yawger.
La moderada reacción de los mercados energéticos es una buena noticia para los consumidores, que por fin encuentran alivio en las estaciones de gasolina.
Según la Asociación Estadounidense del Automóvil (AAA, por sus siglas en inglés), el precio promedio de la gasolina normal a nivel nacional bajó dos centavos, hasta los US$ 3,38 el galón, este martes.
Los precios de la gasolina han caído 14 centavos en la última semana y 42 en un mes.
El promedia nacional casi no ha variado desde hace un año, cuando se situaba en US$ 3,36 el galón.
A pesar de la disminución de los precios de la energía, la OPEP+ mantiene su plan.
El grupo petrolero anunció este domingo sus planes de mantener sus recortes de producción de petróleo, en lugar de tomar medidas para desconectar más suministro.
Los temores ante una recesión siguen sacudiendo los mercados financieros, incluyendo no solo los del petróleo, sino también los bursátiles. Las acciones estadounidenses cayeron con fuerza este martes, en su segundo día consecutivo de pérdidas significativas.
Los informes sobre empleo, pedidos de fábrica y actividad del sector servicios, que superaron las expectativas, han avivado la preocupación de que la Reserva Federal tenga que actuar con más agresividad para sofocar la inflación.
Algunos funcionarios de la Reserva Federal se han mostrado partidarios de subir las tasas de interés hasta el 5% o más el año que viene.
«Este posible entorno de tasas de interés del 5% está asustando a la gente», afirmó Yawger.