Escuelita para padres

Tenemos una gran responsabilidad

Por Sonia Aguila
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Column_Sonia-AguilaHay una frase muy famosa que dice “Los niños aprenden lo que viven”, frase tan simple y tan cierta.

Paso muchas horas con mis estudiantes en clase y cuando se llegan las conferencias entre padres y maestros curiosamente noto cuanto se parecen los hijos a los padres. Salen a relucir muchas similitudes.

No sólo se parecen físicamente, el color de piel, los ojos, el cabello, la estatura, sino que también se parecen en la manera de hablar, los gestos y las palabras que utilizan. Pareciera como si volvieron a nacer los padres.

Que responsabilidad tan grande es ser padres.

La meta, el objetivo es que nuestros hijos sean mejores que nosotros y muchas veces los padres olvidan que están siendo observados por sus hijos a cada instante. Debemos preocuparnos por la manera en que actuamos, lo que decimos, como pensamos por que los hijos lo imitaran.

No hay duda que “Los niños aprenden lo que viven”. Si en el hogar existe armonía, los niños llegan felices a la escuela listos para aprender.

Comparten con alegría lo que hicieron con la familia el fin de semana, a donde fueron, lo que mamá y papá dijeron, etc.

Por lo contrario, si en casa hay muchos problemas, gritos y la televisión esta prendida mucho tiempo, afecta a los niños emocionalmente causando problemas en su aprendizaje.

Padres y maestros queremos ver a los niños felices.

Los padres deben hacer lo posible por pasar tempo de calidad con los hijos. Los niños van creciendo y prefieren usar su tableta electrónica o teléfono en lugar de salir con la familia.

Los niños necesitan su independencia y espacio al pasar los años, pero eso no significa que olviden a su familia.

Planee actividades para la familia como ir al cine, salir al parque o ir de paseo. Sus hijos crecerán con esas memorias inolvidables.

Otra cosa que los padres deben recordar es no discutir ni arreglar sus problemas delante de los hijos.

No arruine, ni perjudique la niñez de los niños haciéndolos presenciar discusiones ni peleas entre adultos.

Eso les afecta en el momento y en su futuro ya que crecen pensando que esa es la manera de vivir.

Las escuelas están ahora enfocando mucho mas en el niño completo, es decir, no sólo se preocupan por su nivel académico, como va en matemáticas, escritura y lectura, pero también se preocupan por su bienestar emocional, social y físico.

Por ejemplo, en las escuelas ahora existe una póliza de no azúcar.

No se permiten meriendas azucaradas, ni jugos. El cambio es que en algunas escuelas únicamente se permite frutas, verduras y agua pera merendar.

Las autoridades escolares están preocupados por la salud de los niños.

Lo invito a que analice como viven sus hijos. ¿Está su hijo feliz, se siente escuchado, comprendido, amado?

Si necesita ayuda porque no sabe que hacer con los problemas de sus hijos haga una cita con la consejera de la escuela.

Ella podrá ayudarle o la referirá a otros servicios en la comunidad.

Nuestros hijos merecen lo mejor.

Hagamos lo posible por darles una vida llena de felicidad y buenos momentos.

Sonia Aguila es una experta en educación y maestra de la Escuela Canalino de Carpintería.