Por Agencias
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El Gobernador de Texas anunció la semana pasada que construirá un muro fronterizo en su estado, como represalia contra las políticas benéficas del presidente Joe Biden para la comunidad inmigrante.
El republicano Greg Abbott, reveló un plan para la construcción de un muro como el de Donald Trump en la frontera de su estado
El anunció fue hecho en lo que el gobernador llamó una “Cumbre de Seguridad Fronteriza”, donde reunido con alcaldes, jueves, y policía local adelantó la entrega de un plan para que el estado comienza la construcción del muro fronterizo
“Anunciaré la próxima semana el plan para que el estado de Texas comience a construir el muro fronterizo en el estado de Texas”, señaló el gobernador en el mencionado evento, donde además, lanzó críticas a los legisladores por ‘no hacer nada’ ante la situación el frontera
Además, Abbott explicó que la “crisis fronteriza no es motivo de risa… No es un sitio de turismo para que los miembros del Congreso lo visiten y luego regresen a DC y no hagan nada”, lo anterior de acuerdo con la cadena noticiosa local 7ABC.
El polémico gobernador también recalcó que la policía de Texas comenzaría a encarcelar a los inmigrantes indocumentados que crucen la frontera de manera irregular.
Además reveló el motivo de su “Cumbre de Seguridad Fronteriza”.
La reunión fue llevada a cabo para que las autoridades locales conozcan las acciones que el gobernador de Texas esta tomando para “asegurar la frontera sur y abordar la actual crisis humanitaria”, como la construcción del nuevo muro fronterizo.
Esta no es la única polémica acción de este gobernador en contra de inmigrantes, y es que el Gobierno del presidente Biden advirtió que está listo para demandar a Texas si el gobernador de ese estado, Greg Abbott, sigue adelante con su plan de forzar el desalojo de niños inmigrantes.
A fines de mayo, Abbott dio un plazo de 90 días para que las agencias estatales den por terminadas las licencias de los albergues y programas en Texas que cuidan de los niños inmigrantes que han cruzado la frontera y están bajo custodia del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS).
En cumplimiento de esa orden, 52 albergues que operan bajo licencias estatales, y que tienen a su cuidado más de 8,600 niños inmigrantes, deberán cesar sus programas infantiles antes del 30 de agosto.
El HHS tiene actualmente bajo su custodia, unos 200 albergues y programas en todo el país.
Dichos albergues cuidan a más de 16,000 menores de edad, en comparación con unos 22,000 en mayo.
En una carta enviada al republicano Abbott por el abogado del HHS, Paul Rodríguez, se indicó que la decisión de Texas causaría un gran trastorno en estos programas.
La revocación de las licencias estatales implicaría que el Gobierno de Biden deberá alojar a esos niños en instalaciones de emergencia, sin licencia, donde las normas de cuidado quizá no sean apropiadas para los niños inmigrantes e Texas.
