Por Agencias
[email protected]
Un juez federal desestimó el martes una demanda que acusaba al estado de Mississippi de utilizar un requisito discriminatorio de prueba de ciudadanía para algunos nuevos votantes, en virtud de una ley que se remonta a la era de Jim Crow.
La decisión se produjo semanas después de que el estado derogó una ley de 1924, la cual requería que los ciudadanos naturalizados, pero no las personas nacidas en los EE. UU., proporcionaran prueba de ciudadanía al registrarse para votar.
Una nueva ley promulgada en su lugar también generó oposición, pero los grupos de derechos electorales la aceptan a regañadientes y dicen que, en última instancia, debería proteger a los ciudadanos naturalizados de ser marcados incorrectamente como no ciudadanos cuando se registran para votar.
La Secretaría de Estado había estado revisando nombres de posibles nuevos votantes. a través de una base de datos del Departamento de Seguridad Pública estatal, de personas con licencias de conducir y tarjetas de identificación de Mississippi.
Los defensores del derecho al voto dijeron que esta práctica daña desproporcionadamente a las personas de color, al marcarlas como posibles no ciudadanos.
La nueva ley dice que si la base de datos de seguridad pública genera dudas sobre la ciudadanía, el nombre del nuevo votante potencial debe pasar por una base de datos federal de inmigración.
Los grupos que abogan por el derecho al voto y los derechos de los inmigrantes, señalaron que la base de datos federal brinda una salvaguarda para proteger a los ciudadanos naturalizados de ser marcados incorrectamente como no ciudadanos cuando se registran para votar.
“Preferiríamos que no haya coincidencias en la base de datos”, indicó Rob McDuff, abogado del Centro de Justicia de Mississippi en un comunicado de prensa el martes. “No hay problema en Mississippi con los no ciudadanos que intentan votar. Pero dado que el Secretario de Estado creó un programa de comparación de bases de datos de este tipo, (la nueva ley) mejora la situación y disminuye la cantidad de errores que no coinciden”.