Por Agencias
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Los legisladores en California comienzan el martes a debatir si crearán el primer sistema de salud universal en Estados Unidos, en una medida clave para saber si la propuesta reunirá el apoyo necesario para ser aprobada este año, y si será enviada a los votantes, que decidirán entonces cómo financiarla.
Los progresistas en el estado han tratado desde hace años de crear un sistema de salud universal financiado por el gobierno que remplace el actual, que depende de seguros privados.
En 1994, los votantes en California rechazaron abrumadoramente una propuesta que habría generado un sistema de salud universal.
Otro intento fue aprobado en el senado estatal en 2017, pero no pasó en la cámara baja, al carecer de un plan para financiarlo.
Este año, los asambleístas demócratas han presentado dos propuestas.
Una busca crear el sistema de salud universal y establecer sus reglas, y la otra detallaría cómo pagar por la cobertura, con aumentos de impuestos sobre negocios grandes y algunas personas acaudaladas.
La primera propuesta será analizada por la comisión de Salud de la Asamblea, encabezada por el demócrata Jim Wood, que ya ha dicho que votará a favor.
Como la propuesta fue presentada el año pasado, debe ser aprobada por la Asamblea estatal para el final de enero a fin de poder convertirse en ley este año.
La salud universal ha sido debatida desde hace décadas en Estados Unidos, más recientemente durante las primarias presidenciales demócratas en 2020, cuando fue promovida por el senador Bernie Sanders, pero nunca ha estado cerca de ser aprobada por el Congreso.
Los legisladores en Vermont, el estado de Sanders, han tratado infructuosamente de implementar su propio sistema de salud universal.
La legislatura estatal de Nueva York ha ponderado un plan similar.
Los partidarios del sistema en California están adoptando este año una estrategia diferente, una de “divide y vencerás”.
Esperan que separar la idea de salud universal de la cuestión de cómo financiarla les dará más probabilidades de aprobar las propuestas y al final ganar el respaldo de los votantes.
“Podemos debatir la política. Si alguien dice: ‘¿Cómo vamos a pagar por ello?’ entonces tendremos dos asuntos diferentes ahora”, dijo el asambleísta Ash Kalra, un demócrata que es el autor de ambas propuestas.
