Por Redacción
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Los antivacunas que están a punto de fallecer por contagiarse de coronavirus tienen siempre un mismo mensaje: las vacunas funcionan, que se vacunen sus seres queridos.
Y es el mensaje que el matrimonio de Lydia Rodríguez, de 42 años, y su marido, Lawrence Rodríguez, de 49 han enviado a sus hijos.
Como otros antivacunas, pensaron que su cuerpo era «lo suficientemente fuerte» como para combatir el virus sin necesidad de tener la cobertura que aportan las vacunas. Se contagiaron, y quisieron vacunarse, pero ya no había opción.
Rodríguez y todos sus hijos dieron positivo por COVID-19 luego de un campamento de una semana en la iglesia.
Lydia, fue admitida en la UCI el 12 de julio y su esposo, ingresó en otra sala, según The Post.
Los niños fueron puestos en cuarentena en casa cuando otros miembros de la familia intervinieron para cuidarlos.
El niño más pequeño tenía síntomas leves, pero los otros tres estaban asintomáticos, informa The Post.
Finalmente, tanto Lydia como Lawrence fueron colocados en la unidad de cuidados intensivos, luchando contra el virus a solo unos metros de distancia el uno del otro.
Según cuenta el Daily Mail, el matrimonio de Texas se contagió en un campamento de la Iglesia local.
A principios de agosto falleció el padre, quien no fue por trabajo sí el resto de su familia.
Hace apenas unos días falleció, la madre. Mientras, los cuatro hijos, asintomáticos, han estado en cuarentena en casa atendidos por familiares.
PETICIÓN
“Ella creía que podía manejar todo por sí misma, que realmente no necesitabas medicamentos”, ha afirmado un familiar cercano.
En una de sus últimas conversaciones telefónicas con su hermana, la mujer admitió el error de no haberse vacunado y lanzó su última súplica antes de fallecer como consecuencia de la enfermedad: «Por favor, asegúrate de que mis hijos se vacunen».
Ese mensaje se transmitió a los gemelos de 18 años de la pareja, quienes también planean programar una cita para su hermano de 11 años cuando sea elegible y pronto vacunarán a su hermano de 16 años.
Según The Post, Lydia y Lawrence Rodríguez estaban casados durante 21 años y ninguno había recibido al menos una dosis de la vacuna.
El gobierno federal anunció el viernes una nueva extensión del cierre de sus fronteras terrestres con Canadá y México, hasta el 21 de septiembre, para contener la expansión del coronavirus, en medio de la preocupación por la variante delta.
Estos pasos están cerrados desde marzo de 2020, pese a los progresos en la vacunación con casi el 60% de su población mayor de 18 años con la pauta completa. El 51% de la población está totalmente inmunizada contra el covid-19, siendo los adultos de más de 65 años los que registran la tasa más alta de vacunación (81%).
El ejemplo de California es significativo.
A pesar de que la vacunación es gratuita y hay suficientes dosis disponibles, el 49.4% de la población del condado de Los Angeles (2.18 millones) continúa sin inmunizarse.
De acuerdo con los números oficiales, las franjas entre 12 y 17 años (39%) y entre 18 y 34 años (46.8%) registran las tasas más bajas de inmunización.