Por Redacción
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La mayoría de un panel de jueces del Supremo Tribunal Federal de Brasil votó este jueves para condenar al expresidente Jair Bolsonaro por intentar un golpe de Estado en 2022 con el objetivo de mantenerse en el poder tras su derrota electoral, en un fallo histórico que podría significar décadas de prisión y que ya genera repercusiones diplomáticas.
El exmandatario de 70 años, que gobernó entre 2019 y 2022, fue declarado culpable de cinco cargos por tres de los cinco jueces del panel. La jueza Cármen Lúcia, la última en pronunciarse, aseguró que las pruebas presentadas por la Fiscalía demostraban la responsabilidad directa de Bolsonaro.
“Él es el instigador, el líder de una organización que orquestó todos los movimientos posibles para mantener o tomar el poder”, dijo Lúcia en la audiencia.
Solo resta que un juez emita su voto, pero con tres condenas ya se alcanzó la mayoría. Una vez concluida la votación, el tribunal definirá la sentencia, que podría equivaler a varias décadas de prisión. Bolsonaro, quien permanece bajo arresto domiciliario, ha negado los cargos y sus abogados confirmaron que apelarán ante el pleno de 11 magistrados del Supremo.
El expresidente no se presentó al tribunal. Fue visto en el garaje de su casa en Brasilia la mañana del jueves, aunque evitó hablar con periodistas.
Tensiones políticas y repercusiones internacionales
El juicio se desarrolla en un país profundamente polarizado. Mientras opositores celebran la posible condena, miles de seguidores de Bolsonaro han salido a las calles para respaldarlo. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva también se pronunció sobre el caso. “Bolsonaro intentó un golpe en este país, y hay cientos de pruebas”, afirmó en una entrevista con la cadena Band.
Los fiscales presentaron cargos que incluyen intento de golpe, pertenencia a organización criminal armada, abolición violenta del Estado de derecho, incitación a la violencia y amenaza a bienes públicos. El juez Alexandre de Moraes, quien supervisa el caso, señaló el martes que Bolsonaro fue “el líder de un complot golpista” y mostró videos del exmandatario arengando a sus seguidores contra el Supremo Tribunal entre 2021 y 2023.
La atención internacional creció después de que el presidente estadounidense Donald Trump relacionara un arancel del 50% sobre productos brasileños a la situación judicial de Bolsonaro, a quien calificó de víctima de una “caza de brujas”. Observadores creen que Washington podría anunciar nuevas sanciones tras el veredicto, lo que tensaría las ya frágiles relaciones diplomáticas.
Futuro político incierto
Bolsonaro se convirtió en el primer expresidente brasileño condenado por intento de golpe. Ya había sido inhabilitado hasta 2030 para competir en elecciones, pero aún conserva gran influencia política. Analistas prevén que intente designar un heredero que enfrente a Lula en los próximos comicios.
El fallo podría llevar a sus aliados en el Congreso a impulsar una amnistía. Sin embargo, la condena también podría fragmentar su base política. “El bolsonarismo no desaparece con una sentencia, pero se debilita si su líder pierde margen de maniobra”, comentó a medios locales el politólogo brasileño Sergio Abranches.
El tribunal retomará el debate sobre la sentencia este viernes. El desenlace no solo marcará la carrera de Bolsonaro, sino que también pondrá a prueba la resiliencia de la democracia brasileña en medio de una creciente presión internacional.
