El domingo 28 de este mes quedará grabado en la historia de la música porque parte al viaje sin retorno a la edad de 66 años víctima de un infarto fulminante al corazón el compositor y cantante Juan Gabriel en la ciudad de Santa Mónica, California mientras almorzaba informaron medios de comunicación.
Algunos diarios capitalinos de la ciudad de México anunciaron también que el deceso aconteció mientras Alberto Aguilera Valadéz, nombre real de Juan Gabriel, almorzaba. Quizá por su estado físico le dio un ataque de tos que lo llevó a un infarto que terminó con su vida.
Como se recordará el intérprete de No Tengo Dinero tubo su última actuación en El Foro de la ciudad de Inglewood, Ca. el pasado 27 de agosto ante un publico aproximado de 17 asistentes a los que deleito con su talento por alrededor de dos horas con 35 minutos.
Trascendió también que debido al suceso al parecer la compañía disquera pretende lanzar al mercado un DVD con el concierto en mención destacando la frase “felicidades a todos los que están orgullosos de lo que son” expresión con la que Juan Gabriel cerró, sin saberlo, su último concierto.
Por todo lo acaecido nos comunicamos vía telefónica con Sergio Ortega autor del libro Así Fue en donde narra las experiencias que vivió al lado del compositor y cantante con quien compartió algunos años de su vida.
Consternado por el acontecimiento lo primero que nos dijo Ortega vía telefónica es que tiene sentimientos encontrados porque su ídolo ya empezó a ser leyenda, “ve el monstruo que fue y en lo que se está convirtiendo ahora.
De verdad que es una suerte haber formado parte de su vida. Me siento igual que la primera vez en que lo vi. ¡Muy nervioso! A tal grado que todavía no he podido llorarlo”, dice a manera de entrada.
Le aclaro que si bien es cierto que Juan Gabriel ya es una leyenda, él es parte de la misma porque tuvo la suerte de estar a su lado por varios años. Le guste o no a mucha gente que pertenece al circulo social del Divo de Juárez. “Si y hay muchos testimonios de eso”.
Dice muy seguro refiriéndose al material fotográfico y de audio que posee y que consiguió durante su estancia con el hoy occiso.
¿Como te enteraste de su muerte?
“Estaba hablando por teléfono con mi hijo, nos dice, cuando mi mamá me llamó por “messenger” para preguntarme si era verdad que había muerto Juan Gabriel, porque la mayoria de los medios hablaban de eso. La verdad no le di importancia y ni lo tomé en cuenta; hasta me dio risa y pensé para mis adentros ‘este hombre para que se muera todavía le falta mucho’, aunque no puedo negar que me dieron nervios. Luego me llamaste tú y entonces si me empecé a preocupar porque ya eran dos personas las que cuestionaban lo mismo. Pero como no aceptando la realidad creí que estaría en su casa enfermo o en el hospital”.
¿Querías engañarte no aceptando la realidad?
“La verdad si. Se me hacia imposible que se hubiese marchado de este mundo y de momento no lo extrañe, porque ya sabia que en algún momento esto iba a pasar.
¿Porqué lo sabias? ¿Por qué tenias esa idea de que iba a morir pronto?
“La verdad no se como explicártelo. Son cosas que a veces me pasan. Es como un sueño… Te cuento algunas anécdotas; años anteriores de convertirme en padre, ya sabia que tendría un hijo. Y fíjate; mucho antes de conocer Alberto (Juan Gabriel) estaba seguro que viviría a su lado y que formaría parte de su vida. Es algo inexplicable que me sucede con algunos acontecimientos que están por suceder en mi vida. Fue tan grande el presentimiento que tuve de su muerte que hasta le escribí una canción que se titula El Show Continua, además de el video que hice de él en Cancún en donde anuncia su muerte” (la melodía y parte del video lo pueden checar en facebook bajo el nombre de “Así Fue”)
¿Entonces fue algo premeditado? ¿No sabías si estaba delicado de salud o que hubiese tenido complicaciones por sus adicciones? ¿Podríamos decir que estabas preparado para eso?
“No se como explicarte. Pero digamos que la canción ya la tenia preparada para despedirlo. Justo es un homenaje para el”.
Cuando comprobaste el deceso, ¿qué fue lo primero que vino a tu mente?
“Tres cosas al mismo tiempo, contesta con voz entrecortada, tristeza, de repente un especie de escepticismo y asombro. Mucho asombro y cuestionándome; ‘¿será cierto?’. ‘Alberto. Mi amigo. ¿Muerto? No lo puedo creer’. Por eso te digo que estoy en shock. También siento un vacío muy grande porque por algo tan simple como escribirle un correo electrónico se que ya no tiene caso hacerlo porque ya no me lo va a responder, dice con voz entre cortada y a punto de soltar el llanto, aunque tardaba en contestarme sabia que lo veía, pero ahora si le escribo, el no lo va a leer mis recados jamás”
La segunda parte de está entrevista exclusiva, el próximo 13 de septiembre.