The Last Jedi: EL INICIO DE UNA NUEVA SAGA

Hace tan sólo dos años que J.J. Abrams nos hacían llegar, de la mano de Disney, la primera entrega de la nueva y esperadísima trilogía de “Star Wars”, que por fin avanzaba temporalmente del punto en que la dejó George Lucas en la trilogía original que él creó.

En 2012, Disney compró Lucasfilm, la franquicia “Star Wars”, por $4 mil millones de dólares.

Lucas tenía ideas de cómo podía ser esta nueva saga, pero una vez firmaron el contrato, Disney dejó de interesarse por lo que tenía que decir su creador, motivo por el cual muchos fans acérrimos están criticando las decisiones creativas y la dirección que ha tomado ”Los últimos Jedi”.

La última entrega la ha dirigido Rian Johnson y él asegura haber hecho con todo su amor, dedicación y talento.

No lo pongo en duda, pero sin hacer spoilers hay ciertos aspectos irregulares del film que impiden que consiga ser una obra maestra.

Nunca es fácil ponerse detrás de una película tan esperada y de la envergadura de ésta, incluso J.J. Abrams salió escaldado de “El despertar de la fuerza” por ser demasiado parecida a “Una nueva esperanza”, la primera y súper exitosa entrega original de 1977.

Ésta costó $11 millones y recaudó $322 en Estados Unidos y casi $800 millones a nivel mundial. Además, fue nominada a 10 Oscars de la academia de los cuales consiguió 6.

Así, los fans querían ahora algo distinto, y Johnson se lo ha dado, pero parece que la mayoría de fans por internet ahora lo quieren lapidar por ello… qué injusto puede llegar a ser el mundo del cine.

En realidad, ni tanto ni tan poco; sin duda no es la mejor entrega de la saga, y aunque es espectacular, entretenida y tiene algunas secuencias que realmente no serán nunca olvidadas, el film se toma ciertas licencias tonales que no considero acertadas, puesto que parecen no tomarse el film suficientemente en serio.

Una cosa es que tenga puntos de humor, la otra que a momentos parezca que el film pretende ser una comedia, y menos en la entrega que tenía que supuestamente ser la más seria y oscura.

Johnson, conocido por su opera prima “Brick” (2005) protagonizada por Josep Gordon-Levitt, el famoso episodio de la mosca de “Breaking Bad” o el film de culto “Looper”, también protagonizado por Levitt y Bruce Willis, la cual le supuso el éxito comercial y de la crítica.

“Los últimos Jedi” arranca por todo lo alto con una de las mejores secuencias del film, una impresionante y milimétrica escena de acción en la que por fin vemos brillar al personaje de ‘Poe Dameron’ (el guatemalteco Oscar Isaac) con el fabuloso robot ‘BB-8’ encima del icónico X-wing.

Una batalla entre la malvada Primera Orden liderada por el ‘General Hux’ (Domhnall Gleeson) y la Resistencia, liderada por la ‘General y Princesa Leia Organa’ (Carrie Fisher, a quién dedican la película al ser a última vez que interpreta el mítico personaje).

‘Poe’ intenta de todas las maneras posibles destruir un acorazado de la Primera Orden poniendo en jaque al escueto ejercito de la resistencia, actitud que le acarreará muchos problemas con sus superiores.

Mientras tanto, la joven Rey (Daisy Ridley) intentará convencer a ‘Luke Skywalker’ (Mark Hamill) para que le enseñe el camino para convertirse en Jedi.

‘Luke’, por algún motivo, se muestra muy reticente a ello, aunque vive en un precioso planeta en harmonía con unas serviciales monjas extraterrestres y unas adorables aves, llamadas ‘Porgs’ que protagonizan memorables escenas junto a ‘Chewbacca’, sobre todo cuando éste está a punto de comerse un par a la barbacoa.

El mayor problema es que la trama de ‘Finn’ (John Boyega) junto a ‘Rose Tico’ (Kelly Marie Tran) y ‘DJ’ (Benicio del Toro) es larga, aburrida e innecesaria, extendiendo demasiado el metraje; el film dura dos horas y media.

Por suerte, el eje central de la historia es la relación cada vez más fuerte entre ‘Rey’, la fuerza, el lado oscuro y ‘Kylo Ren’, desenmascarado por ordenes del temible ‘Snoke’.

Durante la mayor parte del metraje, esto sacar a relucir los dotes interpretativos de Adam Driver, que resulta ser el personaje más apasionante y magnético del film.

Ambos protagonizan una espectacular escena de lucha en la guarida del general Snoke (Andy Serkis).

El film logra culminar en un clímax apoteósico en el que la épica y los efectos visuales brillan junto a un giro final que funciona como un tiro.

Ahora solo falta ver cómo termina esta trilogía la que fue inugurada por J.J. Abrams.

Esperemos que a parte de entretenida y espectacular, sea capaz de resolver los enigmas que siguen abiertos.

“Los últimos Jedi” no consiguió superar el record del primer fin de semana más taquillero de la historia que logró “El despertar de la fuerza” con $247 millones de dólares, pero consiguió 220, amortizando en menos de una semana lo que costó; $212.

A día de hoy acumula $800 millones a nivel mundial y sin duda superará el billón durante la primera semana de 2018.

Para los más nostálgicos decir que no faltan momentos con personajes míticos de la saga, como ‘Yoda’, ‘R2D2’ o ‘C3PO’.