
Por Redacción
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Una tormenta repentina descargó en pocas horas el equivalente a varios meses de lluvia en la región montañosa de Texas Hill Country, provocando el desbordamiento del río Guadalupe y dejando al menos 13 muertos y más de 20 niñas desaparecidas, que participaban en un campamento de verano.
Las autoridades desplegaron equipos de rescate en botes y helicópteros en busca de sobrevivientes, mientras familiares desesperados llenaban las redes sociales con súplicas de información. El vicegobernador Dan Patrick declaró que se habían encontrado entre seis y diez cuerpos, aunque el sheriff del condado de Kerr, Larry Leitha, elevó la cifra a 13 fallecidos.
“Algunos son adultos, algunos son niños”, dijo Patrick en conferencia de prensa. “No sabemos de dónde vinieron esos cuerpos”.
Las intensas lluvias —más de 25 centímetros (10 pulgadas) durante la noche— provocaron inundaciones repentinas que atraparon a residentes y campistas. El agua arrasó viviendas, caminos y dejó a decenas de personas aisladas.
Niñas desaparecidas en campamento
Las autoridades confirmaron que más de 20 niñas que asistían a campamentos de verano en el área se encuentran desaparecidas. “Estoy pidiendo a la gente de Texas que haga una oración de rodillas para que encontremos a estas jovencitas”, expresó Patrick.
Camp Mystic, un campamento cristiano para niñas ubicado a orillas del río, informó que sufrió “inundaciones de nivel catastrófico”. El campamento dijo estar contactando directamente a los padres de las niñas no localizadas. Otros campamentos como Camp Waldemar y Camp La Junta aseguraron en sus redes sociales que todos sus asistentes están a salvo.

En la página de Facebook de la oficina del sheriff del condado de Kerr, familiares publicaron fotos y nombres de personas desaparecidas. Una madre escribió que no podía comunicarse con su hija, quien había alquilado una cabaña en Hunt para pasar el fin de semana festivo con su esposo e hijos.
Erin Burgess, residente del vecindario Bumble Bee Hills, relató que despertó a las 3:30 a.m. por un trueno. “Estaba lloviendo fuerte, pero no parecía tan grave”, dijo. Veinte minutos después, el agua ya entraba por las paredes y puertas. Ella y su hijo se aferraron a un árbol durante una hora antes de poder refugiarse en la casa de un vecino. “Mi novio y mi perro se alejaron flotando. Estuvo perdido por un tiempo, pero los encontramos”, relató.
El juez Rob Kelly, principal funcionario electo del condado, confirmó decenas de rescates y fallecimientos. Sin embargo, evitó dar una cifra exacta. “La mayoría de ellos, no sabemos quiénes son. Uno de ellos estaba completamente desnudo, sin identificación”, indicó.
Respuesta estatal y monitoreo de emergencia
El gobernador Greg Abbott prometió recursos estatales para las comunidades afectadas, entre ellas Kerrville, Ingram y Hunt. Texas Hill Country, al oeste de Austin, es una región turística propensa a inundaciones repentinas debido a su geografía montañosa y caudalosos ríos.
El Servicio Meteorológico Nacional informó que el nivel del río Guadalupe en Hunt subió 6,7 metros (22 pies) en apenas dos horas. El medidor dejó de funcionar después de registrar 9 metros (29,5 pies). “Este tipo de evento te toma por sorpresa. El agua se mueve tan rápido que no te das cuenta del peligro hasta que es demasiado tarde”, dijo el meteorólogo Bob Fogarty.
Las autoridades del condado de Kendall, aguas abajo, emitieron una alerta de evacuación para la comunidad de Comfort, donde las sirenas de inundación fueron activadas. “La situación no está mejorando”, advirtió la oficina del sheriff local.
Impacto también en Nueva Jersey
Mientras Texas enfrenta esta crisis, las tormentas también causaron al menos tres muertes en Nueva Jersey. Dos hombres, de 79 y 25 años, murieron en Plainfield al caer un árbol sobre el vehículo en el que viajaban. Las autoridades no revelaron sus identidades.
La ciudad de Plainfield canceló su desfile del 4 de julio, concierto y fuegos artificiales debido a los daños. “Estas tormentas devastadoras han dejado cicatrices profundas y daños generalizados en nuestra comunidad”, dijo el alcalde Adrian O. Mapp.
En el noreste del país se reportaron apagones, árboles caídos y granizo de gran tamaño, afectando a comunidades desde Nueva Jersey hasta Nueva Inglaterra.