Devastadores incendios forestales arrasan California

Bomberos en el área de Los Ángeles están luchando contra incendios forestales que se han intensificado debido a una devastadora tormenta de viento que ha generado condiciones extremadamente peligrosas.

El incendio más grande, ubicado cerca del vecindario Pacific Palisades de Los Ángeles, ha crecido rápidamente hasta alcanzar al menos 2,920 acres (aproximadamente 1,181 hectáreas). La zona enfrenta vientos del norte-noreste de alrededor de 24 km/h, con ráfagas de hasta 48 km/h, aunque las autoridades advierten que las ráfagas podrían intensificarse durante la noche.

Pacific Palisades, hogar de unos 27,000 residentes, no es ajeno a los incendios forestales. En diciembre pasado, el incendio Franklin también afectó a esta comunidad.

Hasta la tarde de este martes, unas 30,000 personas habían sido evacuadas de un total de 10,000 hogares y 15,000 estructuras, incluyendo negocios y otros edificios, según informó el jefe de policía de Los Ángeles, Jim McDonnell.

“Esto podría significar la diferencia entre la vida y la muerte si logramos evacuar a las personas de manera segura”, declaró Margaret Stewart, portavoz del Departamento de Bomberos de Los Ángeles, en una entrevista.

Más de 250 bomberos están desplegados en la zona combatiendo el incendio en Palisades, según informó este martes el capitán Crowley. Entre los recursos movilizados se encuentran 46 camiones de bomberos, tres camiones cisterna, cinco helicópteros y seis ambulancias paramédicas, entre otros.

Por su parte, Southern California Edison, proveedor de electricidad para 5 millones de hogares y negocios, ha implementado cortes preventivos de energía en algunas áreas para evitar que su infraestructura eléctrica se convierta en una posible fuente de ignición de incendios.

Actualmente, alrededor de 8,600 clientes están afectados por los cortes de energía por seguridad pública, una medida que la empresa califica como “una herramienta de último recurso” en medio de condiciones propicias para incendios. Los cortes afectan diversas áreas de los condados de Los Ángeles, Riverside y Ventura.