Justin Trudeau anuncia su dimisión tras casi una década como primer ministro de Canadá

Por Redacción
[email protected]

En tanto, el líder del Partido Conservador, Pierre Poilievre, ha solicitado que se adelanten las elecciones generales previstas para octubre.

El primer ministro Justin Trudeau anunció este lunes su dimisión tras enfrentar una pérdida de popularidad y una crisis interna que debilitó su posición política. Trudeau, quien ha liderado Canadá durante casi una década, continuará en su puesto hasta que su partido designe a un sucesor mediante un proceso competitivo.

“Anoche, durante la cena, compartí con mis hijos la decisión que hoy hago pública. Planeo renunciar como líder del Partido Liberal y como primer ministro una vez que se elija a un nuevo dirigente”, declaró Trudeau desde su residencia en Rideau Cottage, Ottawa. También destacó que su retiro busca reducir la polarización política y facilitar un “nuevo comienzo” tanto para su partido como para el Parlamento.

El líder liberal reconoció los retos que enfrentó en sus años de mandato: “Desde 2015 he luchado por fortalecer la clase media, avanzar en la reconciliación, defender la democracia, combatir el cambio climático y preparar nuestra economía para el futuro. Nos encontramos en un momento crítico en el mundo”, sostuvo, defendiendo su gestión.

Sin embargo, el desgaste político fue evidente. Desde diciembre, las tensiones dentro de su gobierno aumentaron tras un intento fallido de destituir a Chrystia Freeland, ministra de Finanzas y viceprimera ministra, quien posteriormente renunció acusando a Trudeau de “trucos políticos”. Esta salida debilitó aún más la posición del primer ministro.

El gobierno de Trudeau enfrentó críticas por su manejo de la economía, el aumento del déficit y la inflación, así como la creciente crisis inmobiliaria, exacerbada por la llegada masiva de inmigrantes. Aunque se impusieron restricciones a la compra de viviendas por parte de extranjeros, estas medidas no lograron solucionar el problema.

Además, Trudeau sufrió humillaciones públicas, como los comentarios del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien lo calificó como “gobernador” del “Gran Estado de Canadá” y amenazó con imponer aranceles a las importaciones canadienses. Esto obligó a Trudeau a realizar gestiones urgentes para evitar mayores conflictos comerciales con su principal socio económico.

Pierre Poilievre, líder conservador y favorito en las encuestas, criticó duramente la gestión de Trudeau y pidió elecciones inmediatas para ofrecer a los canadienses una “alternativa real”. En un mensaje en redes sociales, Poilievre acusó a los liberales de intentar “esconder a su impopular líder” antes de los comicios y reiteró su compromiso con reducir impuestos, construir viviendas y restaurar la seguridad en las comunidades.

Entre los nombres que se barajan para suceder a Trudeau se encuentran Chrystia Freeland, Dominic LeBlanc (ministro de Finanzas) y Mark Carney (exgobernador del Banco de Canadá). Sin embargo, los analistas consideran que será difícil para el nuevo líder liberal enfrentar unas elecciones con tan poco tiempo de preparación.

Trudeau llegó al poder en 2015 con una agenda progresista que prometía igualdad de género, lucha contra el cambio climático y reconciliación con las comunidades indígenas. Aunque logró importantes avances, como la implementación de medidas a favor del libre comercio y el fortalecimiento de la clase media, su liderazgo quedó marcado por la polarización política y los desafíos económicos.

Con su renuncia, se cierra un capítulo importante en la política canadiense, mientras el país se prepara para una nueva etapa llena de incertidumbre.