Desde el primer día de clases, los maestros notan el nivel académico de cada estudiante.
Aunque estén en el mismo grado y tengan la misma edad, algunos están avanzados, otros son de nivel promedio y algunos nivel bajo.
¿A qué se debe esto? ¿Será que sus genes son diferentes ? ¿Ya lo traen de familia?
La realidad es que los primeros cinco años son cruciales l@s niñ@s son como esponjas que absorben todo.
L@s estudiantes avanzados son usualmente porque los padres hablan mucho a los hij@s, conversan de todo, hacen preguntas acerca de lo que ven cuando salen, visitan lugares como museos y bibliotecas, tienen un mejor vocabulario y curiosidad por aprender todo.
Es muy interesante que cuando l@s hij@s están pequeñ@s los padres y madres están ansiosos por que caminen y hablen, y cuando crecen, les piden que se sienten y se callen.
No haga eso, no hay nada como conversar con sus hij@s, ya que son curiosos por naturaleza.
Mejor comparta su conocimiento, enséñeles a lavar el auto, regar las plantas, separar la ropa blanca y de color, contar monedas.
Recuerdo que cuando era pequeña me encantaba ayudar a mi mamá a hacer la comida.
Desde crecer los pollitos, cocinar la gallina y hacer un caldo de pollo.
Estaba fascinada con el procedimiento y decía que cuando creciera yo iba a vender pollo.
Recogíamos los huevos del corral y me fascinaba ver a mi abuelito ordeñar las vacas, tomar leche caliente y ver a mi abuelita hacer queso o panela con la leche de sus vacas.
En clase estamos aprendiendo sobre dos tipos de mentalidad: de crecimiento y fija.
Las personas con mentalidad fija creen que todo es difícil y no son inteligentes, que así nacieron, y no van a aprender.
Por lo contrario, aquellos con mentalidad de crecimiento piensan que aunque las cosas son difíciles no hay que darse por vencido, hay mucho que aprender.
Durante las reuniones de padres y maestros, cuando me reúno con los padres algunos padres comentan de donde van a salir l@s niñ@s inteligentes si ell@s son “burr@s”.
Hay que cambiar esa mentalidad, claro que se puede, todo es posible.
Nuestros padres no tuvieron las mismas oportunidades que nosotros, ell@s no fueron a la universidad, no tenían acceso a la tecnología que tenemos hoy en día, porque eran otros tiempos.
Recuerdo cuando estaba embarazada y en mi babyshower alguien me regaló libros para el bebe.
Cuando abrí el regalo algunas personas se rieron, dijeron: “huy todavía no nace. Falta mucho para que lea”.
No pensaron que es buena idea leer desde que los bebés están en el vientre, y podemos leerles cuando son bebés.
Lo animo a que lleve a sus hij@s a la biblioteca y lean libros, visite museos, dlgunos son gratis los Domingos.
Llévelos al zoológico, a la playa, es tan importante que exploren y aprendan, no olvide conversar con sus hij@s y hacerles muchas preguntas.
