Por Agencias
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Quince de las víctimas han fallecido en una ciudad llamada Muçum, en el Estado de Río Grande do Sul.
Al menos 22 personas han fallecido desde el lunes en Brasil a causa de las lluvias torrenciales desatadas por un ciclón extratropical que se ha formado sobre el Atlántico.
Prácticamente todas las víctimas (21) han perdido la vida en el Estado de Río Grande do Sul, según ha informado el gobernador, Eduardo Leite, este martes por la tarde. La otra víctima perdió la vida en la vecina Santa Catarina.
En Brasil, los fenómenos climáticos extremos son cada vez más frecuentes y letales. Lo que no es tan habitual es que causen una cifra tan alta de fallecidos en el sur del país, mucho más rico y desarrollado que el norte. El año pasado, en torno a un centenar de personas fallecieron por las fortísimas precipitaciones en Petrópolis, la antigua capital imperial, en un área de montaña cerca de Río de Janeiro.
El gobernador Leite ha dado la trágica noticia durante una rueda de prensa. “Desgraciadamente recibo ahora la noticia de que fueron localizados 15 cuerpos en el municipio de Muçum. Esto nos causa un inmenso dolor y eleva el número de muertos a 21″, ha explicado, según informa France Presse. Leite ha añadido es que es el peor balance de víctimas por un evento climático en el Estado.
En la misma comparecencia, ha informado sobre el fallecimiento de una mujer durante una operación de rescate. Según su relato, estaba siendo izada a un helicóptero cuando la cuerda de rompió y tanto la mujer como un agente de la policía militar que la ayudaba cayeron al río y fueron arrastrados por la corriente. Solo el uniformado pudo ser rescatado con vida, aunque herido grave.
Como indica la cifra de víctimas, la situación es especialmente dramática en Muçum, que está casi totalmente inundada después de que el temporal hiciera subir 20 metros el nivel del río Taquar, informa el diario O Globo. El ayuntamiento ha pedido a los vecinos de las zonas afectadas por la crecida y áreas cercanas que saquen sus pertenencias de las viviendas y busquen refugio. Protección civil calcula que el río puede subir hasta los 24 metros. El municipio tiene unos 5.000 habitantes.
Entre los 22 fallecidos, hay varias personas arrastradas por el agua en sus coches y dos hombres electrocutados en incidentes independientes.