Cristiano segundo
Por agencias
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CIES Football Observatory que ha publicado una actualización de su estudio sobre el valor de mercado de los principales futbolistas del mundo y el argentino sigue comandando la clasificación con una claridad aplastante, pese a que las diferencias con Cristiano Ronaldo se han reducido ligeramente.
El jugador del Barcelona tiene actualmente un valor de mercado de $370 millones de dólares (su cláusula es de $450 millones), $4 millones más que en el mes de junio y $87 más que la estrella del Real Madrid, que sube de los $200 a los $250.
Hay que recordar que para la elaboración de este ranking el CIES tiene en cuenta no sólo el rendimiento sobre el campo, sino también factores como la edad, los años de contrato restantes o la experiencia internacional.
El podio lo completa Eden Hazard con $150 millones, que supera a Luis Suárez, cuya depreciación se convierte en uno de los datos más destacados que se pueden extraer de la lista, fiel reflejo de la falta de gol del uruguayo desde que debutara con el Barcelona.
El valor de Suárez en junio, antes de su fichaje por el Barcelona, era de $165 millones de dólares.
Acababa de ganar la Bota de Oro y ser el líder sobre el campo de un Liverpool que rozó con la yema de los dedos la Premier League.
Su pase al Barça debería haber hecho que su cotización se disparara, pero por el momento las cosas no están saliendo como se esperaba.
Con tan sólo 3 goles en 12 partidos son un pobre bagaje para un delantero que en las últimas temporadas ha mostrado un instinto goleador letal, a pesar de sus muchos problemas disciplinarios.
Su precio de mercado ahora está en $75 millones de dólares y ha bajado de la 3a a la 16ta plaza.
Suárez además ocupa el lugar de Gareth Bale como fichaje con un mayor sobreprecio.
El Barcelona pagó $125 millones al Liverpool por el uruguayo según las cifras oficiales, por lo que a día de hoy no sólo no ha rentabilizado la inversión, sino que habría perdido $50 millones de euros.
El primer español en la lista es el delantero del Chelsea Diego Costa, que ocupa la cuarta plaza con un valor de mercado de $118 millones, aumentando $50 millones desde su traspaso en junio del año pasado del Atlético de Madrid a Lóndres.
Curiosamente el otro español en el Top 10, Cesc Fábregas, también milita en el Chelsea y está valorado en $100 millones, casi $50 más de los que pagó el club inglés al Barcelona por él el pasado verano.
PUYOL DEJA EL BARÇA
Apenas una hora después de que el barcelonismo se enterara de que el presidente del Club Romeu Bartomeu en persona decidía rescindir el contrato del director deportivo, Andoni Zubizarreta, el mítico Carles Puyol, anunciaba en Facebook su decisión de abandonar el club.
“Por el presente comunicado os quiero anunciar que he decidido dar por finalizada mi relación laboral con el Fútbol Club Barcelona. Estos tres meses y medio me han dado la oportunidad de ver el otro lado del club. He aprendido mucho, estoy muy agradecido y, ahora, quisiera experimentar otras cosas y desde otros lugares”, escribía.
Tras retirarse del fútbol por motivos físicos, pues sus rodillas le impedían realizar cualquier tipo de esfuerzo físico, incluso le costaba caminar, Puyol desea “crecer tanto profesional como personalmente para, en un futuro, poder regresar a esta casa y devolveros todo lo que me habéis dado en estos años”.
¿ENTRENADOR?
El pasado día 15 de diciembre Puyol obtuvo el título de Director Deportivo de la Real Federación Española de Fútbol, después de completar el curso que durante tres meses se impartió en La Ciudad Deportiva de Las Rozas.
Durante este tiempo, Puyol también ha contratado a una profesora particular de inglés y se ha ido formando en el día a día del club al lado de Andoni Zubizarreta.
Si alguna cosa ha sacado en claro el ex capitán del Fútbol Club Barcelona es que el puesto de Zubizarreta no era el futuro profesional que más le atraía.
Puyol nunca se sintió cómodo en los despachos y en primera persona vio como el equipo iba por un lado y la junta por el otro.
Se despide Carles Puyol en su comunicado diciendo: “Me hubiese gustado poder despedirme de todos con las botas puestas, pero la vida no es siempre como uno desea”. Le queda pendiente un homenaje como se merece.
La idea de ocupar un despacho jamás le atrajo y ahora, en su comunicado, explica su deseo de “experimentar otras cosas desde otra perspectiva y otros lugares”.
Por otros lugares se podría entender Nueva York, donde su pareja pasa largas temporadas por motivos profesionales, pero por lo de otras cosas, podría asumirse la oferta que desde hace tiempo tiene sobre la mesa de la RFEF para que se convierta en el director deportivo de la Selección, un cargo más de campo que de despacho.
