Por Agencias
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El «defensa pesimista» ya es el quinto máximo goleador del Madrid, sólo por detrás de Benzema, Vinicius, Asensio y Rodrygo.
Está a uno de igualar su mejor registro.
El cumplidor se está volviendo un killer. Nacho, ese «defensa pesimista» al que es complicado encontrar errores y con un don para jugar donde sea -lateral o central- salió del Pizjuán como el quinto máximo goleador del Real Madrid.
Su derechazo a la red para hacer el 2-2 fue la tercera diana que celebra esta temporada, superando a Lucas Vázquez, Camavinga, Isco, Militao y Alaba (todos ellos con dos en su haber). Ahora mismo hay tres futbolistas con tres goles: Nacho, Modric y Kroos.
Pero hay un dato que aúpa al madrileño: él ha llegado a esa cifra con menos minutos (1.935′) y muchas menos titularidades (20, por 15 suplencias; lleva 35 partidos esta temporada).
Sólo Benzema (39), Vinicius (17), Asensio (10) y Rodrygo (4) han marcado más en el equipo.
Una estadística que ensalza la pólvora del canterano, pero, al mismo tiempo, retrata la de algunos como Jovic (1), Bale (1), Hazard (1) o Bale (0) con menos dianas que el teórico tercer central de la plantilla.
Nacho es, por tanto, el defensa más goleador del Real Madrid este curso.
Su primer zarpazo fue en la primera jornada (1-4 en Mendizorroza), cuando se lanzó con todo para empujar a la red, con la puntera de la bota, un centro cerrado.
El segundo fue en la jornada 14 (1-4 en Los Cármenes), también para hacer el 0-2, pero esta vez rematando de primeras un balón raso.
Y el tercero, el pasado domingo en el Pizjuán (2-3), fusilando con el interior desde el punto de penalti.
Tres dianas y, curiosamente, las tres con la bota derecha. Y lejos del Bernabéu.
Pese a asomarse al olimpo goleador del Madrid, hubo una temporada en la que consiguió más goles: cuatro, la 2017-18.
Por tanto, está a uno de igualar el mejor registro de toda su carrera.
Aquel curso brilló con tanta fuerza que se ganó un puesto en el Mundial de Rusia 2018, donde también marcó un gol (a Portugal en la jornada inaugural; 3-3).
De los cuatro con el Madrid, dos fueron al Deportivo en el Bernabéu, uno al Sevilla también en casa y otro, al Apoel en Nicosia.
Disputó 42 partidos, entre los cuales sumó 3.282 minutos (un gol cada 820′). Esta temporada está firmando un promedio de gol cada 645′, el mejor de toda su carrera.
Tal es su estado de gracia, que cree en poder, a lo largo de las seis jornadas restantes -y dos, tal vez tres partidos de Champions-, encontrar ese tan ansiado cuarto gol.
Una vida de blanco
Es un producto de La Fábrica, tiene 32 años y contrato hasta 2023.
Tras casi una década en el primer equipo, ya es una de las figuras más queridas por la afición, sabedora de que en él no sólo hay un profesional de matrícula, sino también un enorme madridista.
Nacho es un jugador siempre presente para la causa.
Sin un ego desmedido ni una mala cara; dispuesto para lo que haga falta. «Es un jugador con muchísimo equilibrio en su carácter. Sabe perfectamente cuál es su papel en la plantilla. No le afecta si juega o no, mantiene ese equilibrio y le permite tener un nivel de profesionalidad altísimo», dijo Ancelotti en rueda de prensa. Nacho, el decimotercer jugador del equipo en minutos, ya es el quinto en goles.
