Resumen internacional

Por Agencias
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El populista de derecha Javier Milei, ha sido presidente electo apenas hace unos días, y ya los sindicatos y organizaciones sociales de Argentina ya están prometiendo reacción e incluso protestas, si cumple sus promesas de reducir el tamaño del Estado y privatizar empresas.

Milei, quien hizo famosa su campaña con una motosierra acelerada para demostrar lo que haría con el gasto público, dice que se necesitan medidas radicales para reactivar la moribunda economía del país sudamericano y reducir la inflación anual del 140%.

Al día siguiente de ganar las elecciones con un margen más amplio de lo esperado, 56% a 44%, el libertario recalcó en una entrevista que “todo lo que pueda estar en manos del sector privado estará en manos del sector privado”.

Ha dicho que quiere privatizar las empresas de medios de comunicación estatales y las empresas estatales de petróleo y gas, y ha planteado la posibilidad de privatizar la distribución del agua y el servicio de trenes, así como poner fin a todas las obras públicas.

Los líderes sindicales dijeron el jueves que están prestando mucha atención a lo que dice el presidente electo libertario y que lo que escuchan va en contra de sus intereses.

“Tenemos claramente como idea central el desarrollo del país, con la producción y la creación de empleos, y pareciera que todas las afirmaciones (de Milei) sobre recortes en la economía, sobre privatizaciones y demás cosas no van por ese camino”, indicó Héctor Dear, secretario general de la poderosa Confederación General del Trabajo, después de una reunión con otros líderes sindicales.

La oposición más enfática hasta el momento a los planes de privatización de Milei provino del presidente de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas, Pablo Biró, quien dijo el miércoles que Milei “tendrá que matarnos literalmente” para llevar adelante su plan de cambiar la propiedad del Estado sobre Aerolíneas Argentinas.

La mayoría de los líderes sindicales, sin embargo, han enfatizado una actitud de esperar y ver qué pasa, diciendo que están en alerta pero reconocen que los argentinos votaron por Milei y esperarán a que él implemente políticas.

“En el momento en que avancen con reformas relacionadas con los derechos laborales, tanto individuales como colectivos, y cuando las organizaciones laborales afectadas por estos ajustes lo soliciten, la CGT tomará una postura”, afirmó Dear.

Algunos, sin embargo, dejaron claro que la resistencia ya ha comenzado.

“No podemos esperar a ver si este hombre tiene éxito”, dijo Daniel Catalano, secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado, durante la marcha de las Madres de Plaza de Mayo. “No esperamos absolutamente nada de Javier Milei”.

Catalano fue uno de los representantes de sindicatos y organizaciones sociales que se unieron a las Madres de Plaza de Mayo en su marcha semanal en el centro de Buenos Aires el jueves.

El evento semanal del grupo de derechos humanos formado por madres de niños desaparecidos durante la dictadura militar de Argentina (1976-1983) adquirió un tono diferente el jueves cuando los grupos pidieron a sus seguidores que se unieran a las madres para representar simbólicamente la oposición al gobierno de Milei.

MÉXICO

Se informó que el Departamento del Interior de México revocó el viernes el financiamiento para una conferencia sobre la violenta política antiinsurgente del gobierno entre los años 1960 y 1980, lo que generó acusaciones de censura.

La conferencia estaba programada para comenzar dentro de dos días. Los organizadores dijeron que se vieron obligados a cancelar el evento, que se habría centrado en el período conocido en México como la “guerra sucia”.

La decisión ha causado confusión entre los académicos, algunos de los cuales han acusado al gobierno de censurar el debate sobre un período notoriamente violento de la historia moderna de México.

También existe preocupación entre las organizaciones de derechos humanos por un posible retroceso en las políticas que permitieron el procesamiento de los perpetradores de crímenes contra la humanidad.

El evento, organizado por el Colegio de México, habría incluido presentaciones de historiadores desde el Reino Unido hasta Argentina, miembros del panel de investigación de la “guerra sucia” de México y funcionarios del propio Departamento del Interior.

Uno de los oradores, el académico y activista de derechos humanos Sergio Aguayo, anunció por primera vez la noticia en la plataforma de medios sociales X, antes Twitter, afirmando que un funcionario del gobierno le había expresado su preocupación de que “enemigos del gobierno” estuvieran participando en la conferencia.

“Hay diferentes puntos de vista porque para eso hay libertad académica”, publicó Aguayo, calificando de “absurda” la decisión del gobierno.