Inmigrantes indocumentados ya pueden conducir legalmente.
Por Carlos Hernández[email protected]
Eran las 9:50 a.m. del pasado 2 de enero cuando Noemí Rodríguez por fin podría realizar uno de sus más grandes anhelos desde que llegó a este país hace 14 años: sacar un permiso de conducir.
La mujer oriunda de Guerrero fue una de las más de 200 personas que se dieron cita en dicha oficina del Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) ese día, y así tomar ventaja de la Ley AB60 aprobada en octubre del 2013.
“Ya por fin no vamos a andar manejando con miedo y temor que nos quite la policía los autos. Esto es algo que ayudará mucho a los latinos. Mi esposo y yo es algo que hemos estado esperando desde hace mucho tiempo, pues a mí ya me habían quitado un carro y a él otro. En total hemos gastado más de $3 mil dólares en multas, pero hoy gracias a Dios ya podremos manejar sin preocupaciones”, indicó una contentísima Noemí.
Y la batalla de esta madre de dos hijos como la de los políticos que lograron aprobar la AB 60 no fue fácil, pero aún así Noemí “llegó, vio y triunfó”.
Luego de casi cuatro horas de espera y dos intentos para aprobar el examen teórico de la prueba de manejo en una de las computadoras del DMV, la mujer salió con una inmensa sonrisa y un documento que constataba haber pasado la prueba.
“Aunque no son muchas preguntas si pueden ser confusas. La primera vez tuve 7 respuestas malas y ya para la segunda sólo 3, la verdad no me preparé mucho, medio leí el folleto del DMV e hice 3 exámenes de ejemplo que ellos tienen en su página de Internet.”, indicó.
Así, al igual que esta madre de dos hijos las otras decenas de personas tuvieron ese día la oportunidad de realizar el test de manera escrita o por un ordenador o computadora.
Sin embargo, quienes reprobaban su primer intento de manera escrita tenían que esperar a que un empleado del DMV les calificará y de ahí hacer nuevamente línea para hacer el segundo y último intento.
Entre tanto, quienes realizaban la prueba en computadora como Noemí, obtenían los resultados inmediatamente al responder la última pregunta, y sí en caso lo reprobaban podían hacerlo en la misma computadora sin necesidad de formarse nuevamente en línea.
De acuerdo a Lizette Mata, directora estatal de proyectos especiales del DMV, y pesé a algunos inconvenientes en el sistema en diferentes oficinas de su organización, la primera jornada se llevó con toda normalidad.
“Sabíamos que son cientos de miles los interesados en obtener estos permisos y por eso llevamos un año preparándonos para esta demanda. Nada es perfecto, pero aún así se realizó un buen trabajo”, indicó la ejecutiva con sede en Sacramento.
Y es que la demanda ha sido tal que de acuerdo a datos publicados esta semana por el DMV, tan sólo el primer día se recibieron 17,200 nuevas solicitudes para permisos de conducir AB60, donde el tiempo promedio para tramitar la licencias en la Costa Central fue de cuatro horas.
Así, otros de los beneficiados fue el matrimonio de Rafael y Maribel Macías, quienes desde el 12 de noviembre, el cual fue el primer día para poder reservar una cita en una de las 174 oficinas de la entidad en todo California.
“Siento este día como uno de los más felices que he estado en este país, ahora ya con licencia todo cambia, la vida se le hace a uno más fácil acá, porque el auto es indispensable”, indicó Rafael.
Y es que Rafael quien llegó a este país hace 19 años desde la Ciudad de México, se dedica al rubro de la construcción y donde para ganarse la vida debe conducir un pick up donde trae sus herramientas.
“Gracias a Dios nunca me quitaron un auto, siempre he conducido muy precavido y respetando la ley. Después de llegar del trabajo, guardaba las llaves y ya no salía”, sostiene Rafael.
Rafael es uno de los pocos afortunados que no tendrán que esperar a realizar el examen práctico de manejo en el DMV, ya que como él explica, tenía licencia de conducir hasta el 2008.
“La última vez que renové la licencia fue en el 2003 y se me venció en el 2008, ahí ya no la pude sacar otra vez, pero ahora que pase el examen me dieron ya un permiso temporal y que no tengo que hacer el examen práctico”, compartió un alegre Rafael.
La pareja ha esperado este día por años, de tal modo que hasta auto nuevo compraron hace menos de un mes.
LICENCIAS: MÁS CLIENTES Y MEJORES AUTOS
De acuerdo con Luis Quintanar, gerente de ventas de autos usados para Santa Barbara Nissan, el interés de la comunidad inmigrante ya se está dejando ver.
“Muchas de las personas que están sacando esta licencia ya han venido a preguntar y ver autos, de hecho ya hicimos un par de ventas. Esto es buenísimo para todos, tanto para ellos como para la economía local. Era algo (los permisos de conducir) que se necesitaba desde hace mucho”, indicó Quintanar.
Al mismo tiempo, el gerente manifiesta que gracias a las nuevas licencias las instituciones financieras y bancos tratarán diferente y mejor a los clientes que porten uno de esos permisos, ya que ahora tendrán más información de quién es el cliente y más seguridad en el préstamo.
“Las licencias acaban con dos barreras que se tenía a la hora de dar prestamos: primero, le dan a los bancos más seguridad sobre el inmueble, en este caso el auto, y segundo, les dan la seguridad que a estas personas no les incauten el vehículo”.
De acuerdo a Quintanar, el interés para personas con una licencia de otro país y sin seguro social, rondaba del 7.9% al 10.9%, pero ahora la expedición de los permisos de conducir brindará mejores condiciones para esta clase de prestamistas.
Precisamente ese fue el caso de los Macías, ya que Rafael le compró un Nissan Versa a Maribel, y su interés fue de tan sólo el 2.4%.
“Yo tuve la oportunidad de crear buen crédito con mi Tax ID, mi puntaje es de 796, entonces así fue como me quedó el crédito muy bajo y ahora tenemos carro nuevo”, señala Rafael, quien asegura haberse animado a comprar el auto antes de sacar la licencia por el hecho que “obtenerla ya era sólo cuestión de trámite y tiempo”.
Por su parte, Walter Alfaro, gerente general de Perry Ford de SB, está trabajando junto con su personal para que los beneficiados de la ley AB60 no tengan ningún contratiempo a la hora de comprar y aplicar para el crédito.
“Siempre hemos estado consciente de la necesidad de la comunidad inmigrante, y esta vez no será la excepción. Más de la mitad del personal es bilingüe y ya trabajamos con bancos para que les puedan financiar sin necesidad que tengan un seguro social. Esta licencias harán todo más fácil”, explica Alfaro.
Alfaro también indicó que las personas deben romper el mito que las ventas de autos pequeños los tratan mejor, ya que en su agencia cualquier carro que venden pasa por un estricto control de calidad como lo es el proceso de 139 puntos de inspección.
“Nuestros clientes deben saber que acá tendrán autos de calidad, ya sean nuevos o certificados (usados) y no apostar a que en seis meses el carro tenga problemas y les salga más caro que uno nuevo, como muchas veces pasa cuando se compra en esas tiendas de la esquina”, explicó.
Al mismo tiempo, Alfaro preveé que como resultado de la AB60 en un mes es cuando realmente se empezarán a ver aumentos en sus ventas, las cuales según sus cálculos serán de entre el 5 al 15%.
Tanto Alfaro como Quintanar indicaron que desde ahora la comunidad inmigrante dejará “las carcachitas por autos más nuevos y de mayor calidad”.
¿QUÉ PRESENTAR Y DÓNDE APLICAR?
Actualmente, el DMV procesa en sus 170 oficinas aproximadamente 27 millones de aplicaciones al año, incluyendo cerca de 10 millones de transacciones relacionadas con licencias de conducir.
Según cálculos de la entidad pública, se estima que unos 1.4 millones de personas se beneficien de la AB60, y según datos del Consulado de México en Oxnard, sólo en los condados de Ventura y SB serán unas 400 mil personas las beneficiadas.
Para obtener los nuevos permisos los interesados deben hacer una cita al DMV, sin embargo, todos los cupos en las oficinas de la entidad estatal en los condados de Ventura y SB, están saturados hasta finales de febrero y principios de marzo de este año.
Según Mata, es por ello que el DMV abrió cuatro oficinas temporales en California en las ciudades de Lompoc, Stanton, Granada Hills y San José, donde las personas son atendidas sin necesidad de haber hecho cita previa, para así satisfacer la gran demanda de los inmigrantes.
Una vez en las instalaciones del DMV los aplicantes deben presentar diferentes documentos oficiales de sus países de origen y otro documento que compruebe en California.
Para el caso de los mexicanos pueden mostrar una matrícula consular o un pasaporte que hayan sido emitidos después del 2008, en el caso de los centroamericanos el DUI o un pasaporte emitido del 2010 para la fecha, mientras que para los sudamericanos los pasaportes también deben ser del 2010 o más nuevos.
Además de esto, todos los interesados deben también presentar un recibo, que tenga el nombre y una dirección de California del aplicante, ya sea de un servicio público básico (Electricidad, agua, gas o teléfono) o también un estado de cuenta de una institución bancaria y sino un recibo o carta de un hospital, clínica, de una escuela, de una universidad o de un instituto de educación superior (SBCC, Oxnard College o Allan Hancock).
Aunque Noemí y Maribel, ya aprobaron el examen teórico y su sueño de tener un permiso de conducir está más cerca que nunca, aún deben aprobar la última prueba: la de manejo.
Éstas según el DMV se empezarán a realizar desde esta semana, para las que los aplicantes deben de llegar acompañados por alguien con una licencia vigente y con un vehículo o camioneta con registración y seguro vigente.
“Ya no me aguanto por venir, hacer esa última prueba y pasarla. Estoy aún muy nerviosa, pero también muy confiada de aprobarla y por fin tener mi licencia”, finaliza una agradecida Noemí.