“The Last Dance”: la mejor serie documental deportiva ahora mismo

Geoffrey Cowper es oriundo de Barcelona, graduado en Producción Cinematográfica de Barcelona y director de varios films, que ha presentado en numerosos festivales de cine.

Más de 60 días después de que el mundo entrara en confinamiento debido al COVID19, los serie adictos siguen encerrados en casa consumiendo todo lo que pueden a un ritmo de vértigo, dejando las plataformas de streaming sin contenidos nuevos por ver.

Por suerte para todos, ESPN lanzó el pasado 19 de abril la esperadísima miniserie sobre Michael Jordan, el mejor jugador de baloncesto de todos los tiempos, para la gran mayoría.

Al día siguiente del estreno, NETFLIX sacó también los dos primeros episodios de la que es sin duda la serie del momento.

“The Last Dance” es una miniserie de 10 capítulos dirigida por el experimentado documentalista deportivo Jason Hehir (“Andre the Giant”).

Se estrenan semanalmente dos episodios -en estos momentos hay 8 disponibles- creando un hype en NETFLIX sin precedentes.

Este sistema no nos permite devorar toda la serie de golpe, y nos obliga a degustarla de la misma forma en que Jordan lo haría de un buen whiskey o de un puro habano, potenciando que su popularidad se dispare exponencialmente gracias a este apasionante viaje al pasado.

La serie rinde homenaje al mejor equipo de baloncesto de la historia, junto a los Warriors actuales y a los Lakers de Magic Johnson, aunque no está solo al servicio de los fans, ya que ofrece un vistazo refinado y muy amplio al legado y a los problemas de los Bulls.

La serie pivota entorno a la mítica temporada 1997-98 de los Chicago Bulls, la última en la que Jordan jugó para la franquicia de Illinois, pero siempre mirando hacía los orígenes de todas las piezas que fueron clave para que los Bulls ganaran 5 campeonatos de la NBA hasta esa fecha.

Pero no es oro todo lo que reluce, y las crecientes fricciones de los jugadores y de su entrenador, Phil Jackson, con el gerente general del club, Jerry Krause, harían casi imposible repetir la increíble proeza de conseguir un segundo triplete de anillos consecutivos.

Además el futuro de la plantilla y del cuerpo técnico estaban contra las cuerdas.

El primer capítulo arranca con Jordan de espaldas invitándonos a reflexionar sobre su extraordinaria historia, que nos contará en primera persona, como no lo habíamos visto nunca y yendo mucho más allá de los típicos documentales sobre la NBA.

La calidad de la restauración del material baloncestístico es espectacular, ofreciendo un vistazo cristalino a miles de jugadas icónicas que dejan al espectador clavado en el sofá.

El documental se enriquece sumado nuevas y extensas entrevistas, directas y divertidas a todos los protagonistas permitiéndonos rememorar de manera emotiva, los inicios de una de las carreras más memorables de la historia del deporte.

Un emotivo discurso de Jordan a los aficionados de los Bulls en 1984, su primer año, en el que les prometía que algún día traería a Chicago el ansiado anillo.

Quién les iba a decir que 13 años más tarde les habría traído 6.

Mike fue un deportista fuera de este mundo, y en palabras del mismísimo Larry Bird, en un partido de los playoffs en el que MJ anotó 63 puntos, parecía que Dios se había disfrazado de Michael Jordan.

“The Last Dance” apuesta por una acertadísima estructura en la que vamos yendo y viniendo del pasado al presente, desde los inicios de las carreras de los jugadores principales, desde su niñez a sus equipos universitarios y hasta llegar a la NBA.

El segundo episodio entra en detalle en la vida de Scottie Pippen, su ascenso hasta convertirse en uno de los mejores jugadores de la NBA, el eterno numero 2 de los Bulls, aunque la diferencia salarial entre Pippen y sus compañeros fue siempre abismal, creando un creciente conflicto con Jerry Krause, que acabaría estallando cómo una bomba de relojería.

El tercero se centra en Dennis Rodman, conocido por ser una jugador provocador y extravagante, pero figura clave de los Bulls que afirmaba que “podría estar muerto o ser un drogadicto”, pero que por suerte acabó jugando en la NBA y acabó siendo el mejor reboteador de la historia.

Su energía es clave para llevar a su equipo a la victoria, pero su personalidad atraía el drama fuera de los estadios.

La sección en la que pide permiso para ir a Las Vegas 48 horas y Jordan tiene que ir a buscarlo en persona, no tiene precio.

También vemos la relación especial que hay entre él y Phil Jackson, a quien conocemos mejor en el cuarto capítulo, donde conocemos su actitud ganadora y su fascinante filosofía de vida que permitieron a los Bulls llegar a otro nivel. Pasaron de hacer un juego que giraba entorno a Jordan a jugar unidos cómo equipo, consiguiendo por fin hacer realidad su ansiado sueño de ganar su primer anillo de la NBA.

El quinto episodio está dedicado al recientemente fallecido Kobe Bryant, uno de los mejores jugadores de baloncesto de la historia y a quien Jordan siempre consideró como un hermano pequeño.

En este capítulo presenciar el segundo título consecutivo de los Bulls y a Jordan convertirse en un fenómeno de masas mundial ganando el oro por segunda vez en las Olimpiadas de Barcelona de 1992, con el legendario Dream Team, que tenía a Magic, Bird, Isahia Thomas, Irvin, entre muchos.

“The Last Dance” es una oportunidad histórica para revivir una de las mejores historias del deporte, la de ‘Air Jordan’ que batió todos los récords posibles, desde que fue Rookie del año en 1985, a ser 6 veces campeón de la NBA (1991, 1992, 1993, 1996, 1997, 1998), y el MVP en cinco de las finales.

Valoración: 5 estrellas de 5