Por Redacción
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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió este jueves que “no habrá más opción que entrar y matarlos” si continúan los enfrentamientos internos en Gaza, elevando la tensión tras una semana de frágil alto el fuego entre Israel y Hamás.
La amenaza, publicada en su red Truth Social, fue la declaración más contundente de Trump desde que mediara un acuerdo para el cese de hostilidades y el intercambio de rehenes la semana pasada. Aunque inicialmente minimizó los nuevos episodios de violencia, el mandatario endureció su discurso al señalar que Estados Unidos podría “actuar bajo sus auspicios”, sin enviar tropas directamente a la región.
“No seremos nosotros”, aclaró Trump ante reporteros en la Casa Blanca. “Hay personas muy cercanas, muy cerca, que entrarán y harán el trabajo muy fácilmente, pero bajo nuestros auspicios”.
El mandatario republicano dijo el martes que Hamás había “eliminado un par de bandas muy malas” y matado a varios de sus miembros, algo que, según afirmó, “no le molestó mucho”. Sin embargo, el jueves mostró menos paciencia ante los asesinatos internos cometidos por facciones rivales dentro del devastado enclave palestino.
Crisis de seguridad y vacío de poder en Gaza
Desde que las fuerzas israelíes destruyeron gran parte de la infraestructura de seguridad de Hamás en Gaza, familias poderosas y grupos armados locales —incluidas facciones anti-Hamás presuntamente respaldadas por Israel— han llenado el vacío de poder. Algunos de ellos han sido acusados de robar ayuda humanitaria y venderla en el mercado negro, lo que ha agravado la crisis de hambre en el territorio.
“Se desarmarán, y si no lo hacen, los desarmaremos, y sucederá rápidamente y quizás violentamente”, advirtió Trump.
El alto el fuego propuesto por Estados Unidos establecía que Hamás debía entregar a todos los rehenes, vivos o muertos, antes de que venciera el plazo del lunes. De no cumplirlo, el grupo debía compartir información sobre los fallecidos y facilitar su recuperación “a la mayor brevedad posible”.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, declaró el miércoles que Israel “no hará concesiones” y exigió a Hamás cumplir con la devolución de los cadáveres de los rehenes. El ala armada del grupo respondió que ya entregó los restos de las víctimas a las que tenía acceso.
Washington anunció la semana pasada el envío de 200 soldados a Israel para apoyar la supervisión del alto el fuego, junto con aliados internacionales y organizaciones humanitarias, aunque funcionarios estadounidenses insistieron en que ninguna tropa estadounidense pisará Gaza.
Mientras tanto, fuentes del Gobierno estadounidense indicaron que Hamás ha reiterado su compromiso de devolver los cuerpos restantes y cumplir con los términos del acuerdo. Sin embargo, el ritmo lento de cumplimiento ha generado fricciones con Israel, que acusa al grupo de retener información sobre los rehenes muertos.
