Marvel nos brinda una vez más una película que podría perfectamente haberles salido muy mal, pero que gracias a su sello de calidad, el divertido e ingenioso guión de Rhett Reese y Paul Wernick.
Así, la espectacular dirección novel de Tim Miller y el enorme carisma de su estrella protagonista Ryan Reynolds, la consiguen sacar adelante con sobresaliente nota.
Desde que se estrenó Kick-Ass (Matthew Vaughn, 2010) que no ha habido una película de superhéroes tan alocada, violenta, divertida y sexual como esta, diseñada para los yonkis del cine de acción de antaño y para entretener a los más jóvenes.
Como ya hizo el estudio de moda con el fenómeno mundial The Avengers (Joss Whedon, 2012), Guardians of the Galaxy (James Gunn, 2014) o Ant-Man (Peyton Reed, 2015) ahora con Deadpool consiguen de nuevo seducir al público mundial con su nueva y desenfrenada saga.
Esta es la cinta con el presupuesto más modesto y económico que la franquicia Marvel ha producido hasta la fecha, solo $58 millones es lo que costó. Pero sin duda han amortizado la jugada, batiendo todo tipo de récords de taquilla en lo poco que va de año.
Al ser la película Rated R que más ha recaudado en su primer fin de semana de estreno en la historia de USA ($135 millones) y que ya ha batido la franja de los $500 millones a nivel mundial en apenas dos semanas, y sigue subiendo.
Parece no haber duda en que Disney tiene el monopolio de la taquilla mundial al poseer a parte de su prolífica productora las divisiones de Lucasfilm, Pixar y Marvel.
Volviendo al film, cabe destacar la espectacular secuencia de créditos iniciales al más puro estilo Dumb and Dumber (Peter y Bobby Farrelly, 1994) en donde se nos presenta el tono de la película y a Deadpool.
Después le sigue una escena de acción automovilística por todo lo alto hinchada de esteroides para finalmente volver atrás en el tiempo para conocer el origen de este desenfrenado super héroe.
Wade Wilson, es un mercenario que trabaja en la ciudad de Nueva York ayudando a quienes mas lo necesitan con un estilo muy peculiar. Una noche conoce a una escort Vanessa Carysle (la espectacular Morena Baccarin) en un bar y se enamoran al instante.
Después de una secuencia de montaje en la que vemos el resumen de un año entero de su ardiente y pasional relación sexual, Wade le pide la mano y ella acepta.
Es entonces cuando repentinamente Wade se colapsa y es diagnosticado con cancer terminal, y aunque Vanessa quiere quedarse a su lado para darle todo su apoyo, él no quiere que ella lo vea desmejorar y eventualmente morir.
Ahogando sus penas en el bar de su mejor amigo Weasel (un divertido T.J.Miller), un extraño reclutador de un programa secreto le ofrece una cura experimental para «el cancer». Wade, confuso, decide dejar a Vanessa de lado para intentar curarse.
En el siniestro laboratorio donde es sometido durante semanas a un extremo y doloroso nuevo tratamiento, Wade conoce a Ajax, el villano sexy y Británico del film.
Ajax le inyecta a Wade un suero diseñado para despertarle genes mutantes pero este no funciona, decidiendo inducirle de todas las maneras posibles grandes dosis de estrés para finalmente generar su mutación, que efectivamente lo cura del cancer, pero como efecto secundario queda terriblemente deformado para siempre de cuerpo entero, de hecho según Weasel su cara parece el resultado del acto sexual de dos abocados viejos y arrugados.
Wade finalmente consigue escapar al mas puro estilo John McClane, haciendo estallar el laboratorio de Ajax por los aires. Este pero piensa que Wade ha muerto, ya que queda enterrado bajo las runas, aunque obviamente no es así.
A partir de aqui, Wade se reune de nuevo con Weasel en su bar para intentar animarse un poco y es allí cuando adopta el alias de Deadpool.
Con la compañía del espectacular Colossus y una adolescente con poderes misteriosos, Negasonic (Brianna Hindlebrand) Deadpool quiere localizar a Ajax, pero la trama se complica de forma tópica y Ajax secuestra a Vanessa para conseguir crec el espectacular clímax final de la típica historia de amor de toda la vida.
Suerte que Ryan Reynolds apostó muy fuerte cuando decidió poner toda la carne en el asador y encarar finalmente con éxito a un superhéroe, en Deadpool, y es que sus dotes cómicos ya los vimos en films como Waiting… (Rob McKittrick, 2005).
Según él mismo, este será el último superhéroe que interprete en su carrera, aunque a lo mejor lo haga en múltiples entregas y varios cameos.
Y es que le gustó tanto encarnarlo que decidió vestirse como tal en Halloween del año pasado tras haberse quedado el traje que usó en el rodaje para darle vida al esperado y alocado superheroe.
Como con las otras sagas de la Marvel, seguramente la primera entrega será la mejor, pero independientemente apetecen ver más entregas de esta entretenida ida de olla. ν