Que hermosas son nuestras tradiciones, estamos en el mes de Diciembre y en clase aprendimos sobre las diferentes maneras que las personas celebran esta temporada navideña alrededor del mundo.
Kwanzaa, Las Posadas, Christmas, Hanukkah, como es una época primordialmente religiosa, en la escuela la manejamos con mucho cuidado.
No podemos mezclar la religión con la escuela pública, hay niñ@s, familias que no creen en Dios, por lo tanto, es un tema delicado, hay que respetar.
Pero en casa, los padres si pueden enseñar a l@s niñ@s esas hermosas tradiciones. Tristemente, lo que sucede es que los días festivos se vuelven fiestas de adult@s, de beber con el compadre, chismear con las tías y l@s pequeñ@s en el cuarto pegados al celular.
Este es el tiempo indicado, apropiado para enseñar a sus hij@s nuestras tradiciones y raíces.
Yo recuerdo con mucho cariño aquellos tiempos en que ayudaba a mi abuelita a hacer tamales.
Me encantaba ver que se ponía el mandil y mezclaba la masa, tan solo pensar en eso, puedo oler el rico olor a tamales.
Muchos niñ@s no tienen esos recuerdos porque los padres no les permiten ayudar en nada.
No pueden tocar el árbol, ni el nacimiento, Cuidadito con quebrar las esferas, este año, se me ocurrió invitar a mi mamá a hacer tamales a mi salón de clase.
Mis alumn@s estaban fascinad@s, sus caritas sonrientes, les brillaban los ojos cuando estaban embarrando las hojas con masa, fue una experiencia inolvidable.
Con la tecnología tan avanzada y al alcance de sus manos, puede buscar cómo se celebra la Navidad en otras partes del mundo y en su idioma.
Como dicen por ahí, no aprendemos porque no queremos. La información esta ahí, recuerden lo importante que es la comunicación con sus pequeñ@s, conversen, no se queden callad@s.
La semana pasada vi en la tienda a un padre teniendo una hermosa conversación con su pequeñ@, hablaban de todo lo que había alrededor, parecían dos adultos.
Lo maravilloso de todo esto fue el enorme aprendizaje que sucedía mientras hablaban, porque l@s niñ@s absorben todo como esponjas.
Vivimos en un país muy rico en cultura, hay personas de muchos países, y es preocupante que nuestros hij@s pierdan sus tradiciones y el idioma.
Algunos no quieren tamales el día de Navidad, prefieren ordenar pizza, ni les gusta el ponche ni el atole, lo que significa que es muy probable que en el futuro tampoco a sus hijos les guste por lo que esta tradición poco a poco irá muriendo.
Lleve a sus hijo@ a Las Posadas, desfiles Navideños, celebraciones alrededor de la ciudad, siga en redes sociales la página de su ciudad para que se informe sobre estos eventos multiculturales, no solo son divertidos si no que enriquecen la vida de sus hijos.
Lo invito a que esta época Navideña involucre a sus hijos y hablen de las hermosas tradiciones.
Que la celebración no solo sea para los adultos sino una celebración para toda la familia, felices Fiestas.