Real Madrid buscará compensación de la UEFA tras fallo judicial por la Superliga

Por Redacción
Redaccion@latinocc.com

El fallo ratifica la resolución del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) de 2023, que determinó que las normas aplicadas por la UEFA y la FIFA en aquel momento eran contrarias a la legislación comunitaria y abusaban de su posición de dominio en el mercado futbolístico.

En un comunicado, el club blanco afirmó que “celebra” la decisión judicial que confirma la infracción cometida por la UEFA y adelantó que exigirá “los cuantiosos daños y perjuicios sufridos”. El Madrid insistió en que continuará trabajando “por el bien del fútbol global y de los aficionados”, buscando un modelo más equitativo y transparente de gobernanza deportiva.

La UEFA respondió al fallo señalando que la decisión “no valida el fallido proyecto de la Superliga anunciado en 2021” y aseguró que sus nuevas reglas de autorización, actualizadas en 2022 y 2024, “siguen plenamente en vigor”. El organismo con sede en Nyon afirmó que revisará cuidadosamente la resolución antes de decidir sus próximos pasos.

Por su parte, La Liga española dijo respetar la decisión judicial, aunque minimizó su alcance al precisar que “la resolución no aprueba ni avala ningún formato de competición”, sino que se limita a cuestiones de procedimiento.

El Real Madrid no especificó la cantidad exacta de la compensación que planea solicitar, aunque su reclamación podría incluir pérdidas económicas y daños a su imagen por la suspensión del proyecto.

El fallo se produce cuatro años y medio después del colapso de la Superliga, que se desmoronó en apenas 48 horas tras su lanzamiento por 12 clubes de España, Italia e Inglaterra. Las protestas masivas de aficionados, dirigentes y políticos obligaron a la mayoría de los equipos fundadores a retirarse del proyecto.

A día de hoy, el Real Madrid se mantiene como el único gran club que sigue defendiendo públicamente la iniciativa, junto a la empresa promotora A22 Sports Management, con sede en Madrid. La Juventus abandonó el proyecto en 2024, mientras que el Barcelona ha estrechado relaciones con la UEFA en los últimos meses.

A22 también anunció que pedirá una compensación económica, argumentando que la UEFA “sigue ignorando resoluciones judiciales vinculantes”. Según la compañía, durante el último año se han mantenido conversaciones con dirigentes del organismo europeo para proponer reformas que garanticen una mayor transparencia, sostenibilidad financiera y mejores condiciones para los jugadores y aficionados.

Mientras tanto, el grupo European Football Clubs (EFC), presidido por Nasser Al-Khelaïfi del Paris Saint-Germain y respaldado por la UEFA, ha ampliado su membresía a unos 800 clubes. El Real Madrid no forma parte de esta asociación, lo que refuerza su papel de disidencia dentro del sistema actual del fútbol europeo.

El desenlace de la disputa legal podría tener un impacto duradero en la gobernanza del deporte más popular del mundo y reabrir el debate sobre el equilibrio entre los intereses comerciales, la competencia justa y el poder regulador de las instituciones deportivas.