Por Carlos Hernández
[email protected]
Queda menos de un mes para la fecha límite para presentar impuestos, y luego de un año muy confuso debido a la pandemia del Coronavirus, donde el gobierno ha dado muchas ayudas financieras, también hay muchas reglas que han cambiado y que se hacen imperativas conocer para evitar
Desde el 12 de febrero, el Servicio de Impuestos Internos (IRS) ha estado procesando las declaraciones de impuestos federales para el año fiscal 2020, complicado para los contribuyentes y el IRS por la pandemia de coronavirus y múltiples paquetes de ayuda relacionados con la pandemia aprobados el año pasado.
Es por eso que el mes pasado el IRS anunció la extensión de los plazos de presentación y pago de impuestos del 15 de abril al 17 de mayo, para ayudar a los contribuyentes a navegar por los muchos cambios impositivos y brindarle al IRS la oportunidad de despejar su acumulación de declaraciones de impuestos y correspondencia.
Debido a los cambios en la política fiscal introducidos a través de la Ley CARES (aprobada en marzo de 2020), el paquete de ayuda para el coronavirus en la Ley de Asignaciones Consolidadas de 2021 (aprobada en diciembre) y la Ley del Plan de Rescate Estadounidense (ARPA), la temporada tributaria tiene varios características únicas a tener en cuenta:
El ajuste de los pagos de cheques de Estimulo Económico y una exclusión de impuestos por los primeros $10,200 en beneficios del Seguro de Desempleo (UI, por su significado en inglés), así como cambios en reembolsos de impuestos individuales.
PAGOS DE IMPACTO ECONÓMICO
El IRS y el Departamento del Tesoro enviaron dos rondas de pagos de Impacto o Estimulo Económico a personas en 2020 como parte de paquetes de ayuda para el coronavirus más amplios.
Los pagos, se enviaban mediante depósito directo, cheque en papel o tarjetas de débito prepagas.
Técnicamente, los pagos son créditos fiscales adelantados a las personas en función de su Ingreso Bruto Ajustado (AGI, por su significado en inglés) de 2018 o 2019.
Para la temporada de presentación en curso, el IRS actualizó el Formulario 1040 2020 para finalizar los pagos en caso de que las personas sean elegibles para una cantidad adicional.
“Las personas pueden recibir un pago adicional, en forma de crédito fiscal reembolsable en su declaración de impuestos sobre la renta individual de 2020, de una de dos maneras”, aseguró el Comisionado del IRS, Chuck Rettig.
De acuerdo al Comisionado en la primera, los contribuyentes que no recibieron ninguno de los pagos debido a retrasos en el procesamiento o errores pueden reclamarlo en su declaración que vencé el 15 de mayo.
En segundo lugar, los contribuyentes probablemente se beneficiarán al usar el AGI de 2020 al calcular cualquier crédito que se les adeude.
“Si un contribuyente recibió un pago parcial (o ningún pago) debido a un AGI de 2018 o 2019 por encima del umbral de eliminación gradual, el uso de un AGI de 2020 más bajo lo haría elegible para un pago adicional”, explica Rettig.
Al mismo tiempo, el experto indicó que los contribuyentes que no recibieron un pago por un dependiente elegible también pueden recibir el crédito en su declaración de impuestos de este año.
Además de acuerdo al IRS hay un cambio que traerá gran alivio económico a miles de inmigrantes, ya que aquellos contribuyentes que originalmente no eran elegibles para un pago de la Ley CARES porque no tenían un número de Seguro Social y hacían su declaración con el TAX ID, ahora sí pueden ser elegibles si son parte de una familia elegible de estatus mixto.
“Es decir que su esposa y/o hijos tengan un seguro social válido y declaren de manera conjunta”, recalcó Rettig.
Además el Comisionado, enfatizó que los ajustes solo se hacen a favor de los contribuyentes, por lo que los contribuyentes no verán ningún aumento en su obligación tributaria relacionada con los pagos.
Debido a que los pagos de cheques de estimulo económico son créditos fiscales, el IRS no los calcula como ingresos, por lo que los beneficiados no deberán pagar impuestos por ese dinero, caso diferente al Pago por Deseempleo, el cual sí se deberá pagar impuestos.
Los ajustes para la última ronda de pagos de impacto económico de $1,400 a través del ARPA se realizarán en la temporada de presentación de impuestos de 2022.
BENEFICIOS DEL SEGURO DE DESEMPLEO
Los legisladores respondieron al aumento sin precedentes del desempleo en 2020 con grandes aumentos en el pago de las prestaciones del Seguro de Desempleo (UI, por su significado en inglés).
Los beneficios del UI ayudaron a mantener los ingresos estadounidenses durante el año, por lo que como se mencionó anteriormente sí se consideran ingresos sujetos a impuestos.
“Para evitar una factura de impuestos inesperada al presentar sus impuestos, los contribuyentes habrían tenido que retener correctamente los impuestos de sus beneficios de UI”, enfatizaron autoridades del IRS.
Para los impuestos sobre la renta federales, un contribuyente puede optar por una tasa de retención del 10%, pero no es obligatorio.
Los contribuyentes también pueden remitir impuestos estimados trimestrales durante todo el año.
Es probable que muchos contribuyentes no hayan retenido o ahorrado adecuadamente los impuestos adeudados sobre los beneficios del Seguro de Desempleo, lo que puede crear una obligación tributaria inesperada cuando presenten la declaración al año fiscal 2020.
Para proporcionar una liberación fiscal para los trabajadores desempleados, la ARPA excluyó los primeros $10,200 en beneficios de desempleo para los contribuyentes que ganan menos de $150,000 por año.
Por ejemplo que si alguien ganó $149,999 mil en 2020 y de esos recibió $100 mil del UI, sólo pagará los impuestos correspondientes a $89,800.
“El IRS proporcionará orientación sobre esta exclusión para los contribuyentes que ya hayan presentado su declaración de impuestos y hayan recibido beneficios por desempleo; es posible que no necesiten presentar una declaración enmendada si el IRS calcula automáticamente el impuesto adeudado y envía un reembolso de impuestos si es necesario”, anunció el IRS en su página virtual.
Según el Departamento de Trabajo se pagaron alrededor de $6.4 mil millones en beneficios de seguro de desempleo en el cuarto trimestre de 2019.
Para el segundo trimestre de 2020, y ya con la pandemia del Coronavirus se multiplicó a más de 10 veces hasta los $64.2 mil millones, y para el tercer trimestre de 2020 llegó a $48.7 mil millones en beneficios de desempleo pagados.
Los pagos de beneficios de UI más altos reflejan precisamente el aumento del desempleo que se dio en 2020, donde del 3.5 por ciento en febrero se saltó hasta un 14.8 por ciento en abril, es decir en sólo 2 meses.
Rettig indica que la tasa de desempleo ha bajado pero comparada a épocas normales aún sigue siendo elevada, alrededor del 6.7 por ciento.
CRÉDITOS TRIBUTARIOS REEMBOLSABLES
El paquete de alivio del coronavirus de diciembre incluyó un ajuste en la forma en que se calculan el Crédito Tributario por Ingreso del Trabajo (EITC) y el Crédito Tributario por Hijos (CTC) para el año fiscal 2020.
De acuerdo al Comisionado, ambos montos de crédito se calculan en función de los ingresos del trabajo y se incorporan gradualmente a lo largo del tiempo para las personas con ingresos más bajos.
La incorporación gradual de los ingresos del trabajo significa que una recesión económica, puede reducir el valor de los créditos para las personas que pueden haber perdido sus ingresos debido a la pandemia.
“Es por ello que se recomienda a lo contribuyentes usar las ganancias de 2019 en lugar de 2020 para determinar la elegibilidad crediticia para la presentación de impuestos”, explica Rettig.
Dicha disposición «retrospectiva» aumentará la cantidad total de créditos reembolsables proporcionados a personas de bajos ingresos.
Es así, que se vuelve importante que los contribuyentes comparen los ingresos del trabajo de ambos años fiscales para ver qué es lo mejor para su situación fiscal.
El Comité Conjunto de Impuestos (JCT) estima que el retroceso reducirá los ingresos federales en aproximadamente $4.1 mil millones para 2021.
AUMENTÓ LA DEDUCCIÓN ESTÁNDAR
La deducción estándar para el año fiscal 2020 también aumentó en relación con la inflación, en $200 para los contribuyentes solteros o casados que declaran por separado, $300 para los jefes de familia y $400 para las parejas casadas que presentan una declaración conjunta.
Cabe señalar también que se puede optar por detallar las deducciones, lo que lleva más tiempo calcular, pero puede valer la pena si sus gastos exceden el monto de la deducción estándar.
LIMITE AUMENTADO PARA EL CRÉDITO POR INGRESOS DE TRABAJO
Este año habrá un crédito reembolsable elegible para trabajadores de ingresos bajos y medianos, donde los contribuyentes son elegibles si su ingreso bruto ajustado no es mayor a $50,594 ó $56,844 para aquellos que están casados y presentan una declaración conjunta.
El crédito puede ayudar a ahorrar entre $538 y $ 6,660 en impuestos, dependiendo de los ingresos.
MAYORES DEDUCCIONES POR BENEFICENCIA
Según la Ley de Ayuda, Alivio y Seguridad Económica por el Coronavirus, los contribuyentes ya no tienen que detallar las deducciones para cancelar las contribuciones caritativas.
Esto significa que incluso si toma la deducción estándar para 2020, también puede deducir hasta $300 en donaciones caritativas calificadas.
Si detalla las deducciones, puede deducir hasta el 100% de su ingreso bruto ajustado restante en función de su contribución a organizaciones benéficas.
DEDUCCIONES MÉDICAS
Según otro proyecto de ley que el Congreso aprobó en diciembre, los estadounidenses ahora pueden deducir para 2020 y más allá cualquier gasto médico de bolsillo que supere el 7.5% de su AGI.
Esta es una buena noticia para los contribuyentes que recibieron mucha atención médica el año pasado, siempre que detallen las deducciones para cancelar sus facturas de tratamiento.
PRÉSTAMOS PPP
Otra disposición de la Ley CARES otorgó a los propietarios de pequeñas empresas préstamos del Programa de Protección de Cheques de Pago (PPP), para cubrir gastos elegibles como nómina, servicios públicos, alquiler e hipotecas.
Para la temporada de impuestos, estos gastos se pueden deducir de los ingresos imponibles, y los préstamos en sí se otorgan para ser condonados, en espera de una solicitud y aprobación por parte de la Administración de Pequeñas Empresas.
ESA Y PLANES 529
Las cuentas de ahorro para la educación y los planes 529 son reservas libres de impuestos que se gastan exclusivamente en gastos educativos calificados.
En 2020, los nuevos usos calificados de los fondos 529 incluyen el pago de los costos de los programas de aprendizaje y hasta $10,000 en total en deuda por préstamos estudiantiles.
Pero dado que muchas escuelas cancelaron clases este año, el dinero reembolsado de ESA o 529 debe haber sido devuelto a su cuenta dentro de los 60 días o gastado en gastos educativos, o de lo contrario estará sujeto al impuesto sobre la renta y una multa por retiro.
RETIROS POR JUBILACIÓN SIN MULTAS
Según la Ley CARES, a los contribuyentes menores de 59½ años se les permitió retirar hasta $100,000 de su 401 (k) o IRA sin incurrir en una multa por retiro anticipado.
La desventaja es que el dinero que se retire prematuramente de estas cuentas de jubilación con impuestos diferidos se gravará como ingresos ordinarios.
Aún puede obtener un reembolso sobre ese monto de impuestos reemplazando esos retiros de emergencia en el 401 (k) o IRA dentro de los tres años.
MÁS TIEMPO PARA DEPOSITAR EN IRAS
En virtud de la Ley de Mejoramiento de la Jubilación de Todas las Comunidades de 2019, los propietarios de cuentas IRA tradicionales pueden seguir depositando dinero en ellas más allá del límite anterior de 70 años y medio.
Eso significa una oportunidad continua para que las personas mayores difieran el pago de impuestos sobre cualquier ingreso que hayan escondido en 2020, aunque esos fondos aún estarán sujetos a impuestos cuando se retiren en el futuro.
MAYORES INGRESOS SUJETOS A IMPUESTOS DE SEGURIDAD SOCIAL
Para el año fiscal 2020, los impuestos sobre la nómina del Seguro Social se aplicarán a los ingresos de los trabajadores que ganaron $137,700 brutos, casi $5,000 más que en 2019.
DEVOLUCIÓN DE IMPUESTOS
Muchos contribuyentes están preocupados por los reembolsos de impuestos que se acercan a la temporada de impuestos.
La combinación de circunstancias únicas de política económica y tributaria puede afectar los reembolsos tanto para los contribuyentes individuales como en conjunto.
Las recesiones económicas tienden a afectar los reembolsos porque los contribuyentes tienen ingresos más bajos y la política fiscal tiende a proporcionar un estímulo que fluye hacia los montos de los reembolsos.
Durante la Gran Recesión, por ejemplo, los reembolsos totales aumentaron por encima de la tendencia de alrededor de $250 mil millones en 2007 a $335 mil millones en 2009 antes de permanecer sin cambios durante los próximos años.
Sin embargo, la proporción de declaraciones con devolución de impuestos se mantuvo estable entre el 75 y el 80 por ciento de las declaraciones presentadas en esos años.
El reembolso de impuestos promedio también aumentó, de alrededor de $ 2,200 en 2007 a alrededor de $ 2,600 en 2009, antes de caer a alrededor de $ 2,200 en 2016.
Es incierto dónde terminarán los reembolsos de impuestos para el año fiscal 2020, aunque las tendencias tienden a apuntar hacia niveles de reembolso más altos en comparación con las temporadas fiscales recientes.
Muchos contribuyentes aún tienen que reclamar su pago por impacto económico.
Hasta 9 millones de personas elegibles para un pago no lo habían recibido a mediados de septiembre de 2020.
Además, las personas que no hayan recibido un pago de estímulo de segunda ronda deben indicarlo en su declaración de impuestos para recibir este crédito.
Los contribuyentes deberán vigilar que no reclamen dos veces estos pagos si el pago de la segunda ronda llega después de presentar una declaración, lo que puede requerir una enmienda a la declaración de impuestos.