Opinión

Escuelita para Padres

La maestra Sonia Aguila es una experta en educación que enseña en la Escuela Canalino de Carpintería./EL LATINO

Miles de estudiantes regresaron felices a clases presenciales después de muchos meses aprendiendo a través de la computadora en Zoom. 

El reencuentro con sus amigos fue maravilloso. ¿Y ahora qué? Le recomiendo conocer la maestra o maestros de sus hijos.  

Es muy importante formar una buena relación con la persona que pasará 7 horas, durante los próximos 180 días con sus hij@s. 

¿Usted trabaja, no habla inglés, no tiene tiempo? Son excusas, porque existen mil maneras de interactuar con los maestros. 

Levante el teléfono y llame. 

Envíe un correo electrónico presentándose y también expresando preocupaciones o compartiendo ideas. 

Debido a la pandemia, no permiten a los padres visitar los salones de clase ni ser voluntarios como en el pasado, pero puede mandar una nota, un texto si tiene el teléfono del maestro. 

Muchos profesores son bilingües y también las oficinas escolares tienen personal bilingüe que le puede ayudar a traducir. 

No espere hasta las reuniones para hablar con los docentes, recuerdo hace varios años entró una mamá al salón de clase, y la verdad fue muy incómodo y penoso no saber quien era.  

Nunca la había visto antes y venía a recoger a su hijo para llevarlo al dentista. 

Que no le pase eso a usted. 

No tenga pena de hablar con los maestr@s, a mi en lo personal, me gusta cuando los padres me escriben y preguntan algo, eso indica que les interesa la educación de sus hijos y que están al pendiente. 

Yo, al igual que muchos padres, trabajo, estoy súper ocupada pero nunca estoy ocupada cuando se trata de mis hijos. 

Al principio del año mando un correo electrónico a los maestros de mis hij@s, dono cosas para el salón de clase y trato de expresar cuánto los aprecio, poque ser maestr@ no es nada fácil, especialmente en pandemia.

No olvide preguntar a sus hij@s como les fue en la escuela, es probable que le digan “nada”, en ese caso, haga preguntas específicas.  

A mis hijos les pregunto qué fue lo mejor y lo peor del día. 

¿Con quién jugaron? Qué aprendieron en matemáticas o escritura. 

Lo hemos escuchado muchas veces: padres, maestros y alumnos deben trabajar en equipo, donde los más beneficiados son los estudiantes. 

Quítese la idea que sólo  es trabajo de los maestros educar y enseñar a los estudiantes.  

“Para eso les pagan”, suelen decir algunas personas. 

Los padres son los primeros maestros, por lo tanto, todo comienza en casa. 

Asegúrese de que sus hij@s tengan útiles escolares, lápices, colores, borradores para que puedan realizar sus trabajos en casa.

Por último, comparta con su hij@ lo orgulloso que se siente. 

Sus hijos saben que usted los quiere pero necesitan escucharlo. 

¿Cuándo fue la última vez que le dijo a su hij@? 

“Te quiero?. Estoy feliz de ser tu mamá, tu papá”. 

Entiendo que tal vez usted no escuchó esas palabras de sus padres, pero eran otros tiempos. 

Rompa esas cadenas y comience por hacer el cambio. 

Estoy feliz y bendecida de comenzar mi año 24 como docente, me encanta mi profesión, y espero que este año sea menos complicado que el pasado y nos permita estar abiertos.