Por Redacción
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El pastor de una iglesia del Condado de Ventura ha prometido continuar celebrando el culto en interiores desafiando las órdenes de salud del coronavirus después de que un juez emitió una orden de restricción temporal que prohíbe a la iglesia hacerlo.
“Ojalá no tuviera que llegar a esto, de verdad lo hago, pero estaremos violando la orden del juez. Abriremos este domingo”, dijo Rob McCoy el viernes, horas después de que el juez prohibió a Godspeak Calvary Chapel en Newbury Park celebrar servicios de adoración en interiores.
El juez de la Corte Superior del Condado de Ventura, Matthew Guasco, citó, “una amenaza inmediata para la salud y la seguridad públicas debido al nuevo coronavirus de 2019”, al emitir la orden de restricción temporal.
La orden estará vigente hasta que se celebre otra audiencia el próximo 21 de agosto.
El Condado y su Jefe de Salud demandaron a la iglesia después de que McCoy desafió repetidamente las órdenes de salud diseñadas para limitar la propagación del COVID-19.
Los servicios para hasta 200 fieles ofrecieron «canto, abrazos, sin máscaras», en palabras de McCoy, quien hasta hace menos de tres meses era Concejal de Thousand Oaks.
La demanda se presentó la semana pasada, un día después de que la Junta de Supervisores del condado autorizara acciones judiciales para hacer cumplir las órdenes de salud.
La demanda decía que permitir que la iglesia siga celebrando servicios en interiores podría dañar al público, «incluidas hospitalizaciones y muertes».
“En una escala del 1 al 10 del daño irreparable más inmediato posible es un 10. No hay nada más inmediato o irreparable que la amenaza de que mucha gente va a propagar una enfermedad contagiosa y mortal”, señaló Guasco en la audiencia.
Pero McCoy ha argumentado que el riesgo de propagar el COVID-19 de sus servicios es pequeño y no ha habido un caso confirmado entre los feligreses.
Los abogados de la iglesia también han argumentado que las órdenes de salud son extralimitadas y son superadas por el derecho constitucional a la libertad de expresión y culto.
Un bufete de abogados que representa a la iglesia argumentó que el riesgo de muerte por COVID-19 en el Condado es mínimo.
«Creemos que el COVID-19 se puede combatir con medidas mucho menos restrictivas que prohibir la entrada a la iglesia a todas las personas sanas y nuestros testigos expertos lo demostrarán», dijo un comunicado el viernes de Tyler & Bursch, que defiende a la iglesia a través de una organización sin fines de lucro, Advocates for Faith & Freedom.
La Godspeak Calvary Chapel es una de las pocas iglesias en el estado que han terminado en los tribunales por órdenes de salud estatales o locales que restringen los servicios.
En la mayoría de estados jueces han fallado constantemente en contra de las iglesias por motivos de seguridad pública.
A principios de este año, la Corte Suprema confirmó las restricciones estatales del COVID-19 sobre reuniones religiosas en una demanda presentada por la Iglesia Pentecostal Unida de South Bay de Chula Vista.
Precisamente, el juez del condado de Ventura citó ese caso en la audiencia.
“La Constitución no es un pacto suicida. El ejercicio de las libertades individuales debe ser compatible con la salud pública”, dijo Guasco.
El viernes, el condado de Ventura informó 111 casos de virus recién confirmados, incluidos algunos que se remontan a las pruebas realizadas el 31 de julio.
Ahora ha habido más de 8,000 casos confirmados y 89 muertes en el condado, que tiene una población de aproximadamente 850,000 personas.
Se cree que la cantidad de infecciones es mucho mayor porque muchas personas no se han realizado pruebas, y los estudios sugieren que las personas pueden infectarse con el virus sin sentirse enfermas, es decir asintomáticas.
Para la mayoría de las personas, el coronavirus causa síntomas leves o moderados, como fiebre y tos, que desaparecen en dos o tres semanas.
Para algunos, especialmente los adultos mayores y las personas con problemas de salud existentes, puede causar enfermedades más graves, incluida la neumonía, y la muerte.
REBELDIA
Aún así, el pastor McCoy dirigió este pasado servicio de las 9 a.m. desafiando las órdenes de salud, él ya había prometido el viernes continuar con los servicios en persona a pesar de la orden del juez Guasco.
Una transmisión en vivo del servicio de la mañana mostró a un McCoy sin máscara y un músico de pie ante al menos dos docenas de fieles, la mayoría de los cuales tampoco llevaban máscaras.
No quedó claro en la transmisión en vivo si estaban a 6 pies de distancia.
Al mismo tiempo, el lunes pasado se cambio al juez Guasco por O’neill a pedido de los abogados de la iglesia, y el martes este último negó la orden para que el Alguacil del Condado hiciera cumplir la orden de cierre.
