Por Redacción
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Los Chargers de Los Ángeles y los Lions de Detroit se medirán en el Juego del Salón de la Fama 2025, programado para el 31 de julio, como parte de las celebraciones anuales en Canton, Ohio.
El Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional anunció el miércoles que el enfrentamiento marcará el inicio de la semana de consagración, en la que se celebrará la inclusión de nuevos miembros, entre ellos el veterano ala cerrada Antonio Gates.
Gates, quien pasó toda su carrera con los Chargers, será inducido oficialmente al Salón el 2 de agosto. Lo acompañarán otros tres jugadores seleccionados de la era moderna: el esquinero Eric Allen, el ala defensiva Jared Allen y el receptor Sterling Sharpe.
Los Lions, que terminaron la temporada pasada con un récord de 15-2 antes de caer en la ronda divisional ante Washington, fueron nombrados el equipo local para el juego. Para los Chargers, que concluyeron con marca de 11-6 y entraron a los playoffs como comodines, será una oportunidad de comenzar el nuevo ciclo bajo el mando de su entrenador en jefe, Jim Harbaugh.
El encuentro será transmitido a nivel nacional por NBC, sirviendo como el primer partido de pretemporada de la NFL. La liga suele utilizar este juego para destacar figuras destacadas que serán homenajeadas durante el fin de semana de inducción.
Será la cuarta participación de los Lions en el tradicional juego en Canton, y la tercera para los Chargers. La última vez que Detroit disputó el encuentro fue en 1991, cuando vencieron a los Broncos de Denver por 14-3. Los Chargers, por su parte, no aparecen en el juego desde 1994, cuando cayeron ante los Falcons de Atlanta por 21-17.
La ceremonia de inducción del Salón de la Fama es uno de los eventos más emblemáticos del calendario de la NFL. Cada año, exjugadores, entrenadores y ejecutivos son reconocidos por sus contribuciones excepcionales al deporte.
Antonio Gates, uno de los alas cerradas más productivos en la historia de la liga, jugó durante 16 temporadas con los Chargers, acumulando más de 11,000 yardas y 116 recepciones de touchdown, ambos récords de la franquicia. Su inclusión en el Salón de la Fama ha sido ampliamente anticipada por fanáticos y analistas.
Los otros inducidos de este año también tuvieron carreras notables. Eric Allen fue un esquinero dominante durante los años 90 con los Eagles, Saints y Raiders. Jared Allen acumuló 136 capturas durante su carrera como defensivo con los Chiefs, Vikings y otros equipos. Sterling Sharpe, hermano del miembro del Salón Shannon Sharpe, fue una fuerza ofensiva clave con los Packers antes de que una lesión pusiera fin prematuro a su carrera.
El Juego del Salón de la Fama será también una vitrina temprana para los nuevos talentos de ambos equipos, especialmente los novatos seleccionados en el Draft 2025. El evento abre oficialmente la pretemporada de la NFL, generando entusiasmo entre aficionados que esperan el regreso del fútbol profesional.
La ciudad de Canton, hogar del Salón de la Fama, se prepara para recibir a miles de fanáticos de todo el país durante la semana de celebraciones, que incluyen desfiles, firmas de autógrafos y exhibiciones especiales.
