
Por Redacción
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Manchester United protagonizó una remontada épica este jueves en Old Trafford para sellar su pase a las semifinales de la Europa League, al vencer 5-4 al Olympique de Lyon en un dramático partido que se resolvió en la prórroga con goles en los minutos 120 y 121.
En un curso plagado de altibajos, el conjunto dirigido por el portugués Rúben Amorim logró una de las victorias más emocionantes de su temporada, y quizás una de las más memorables en la historia reciente del club, gracias a los goles agónicos de Kobbie Mainoo y Harry Maguire.

El duelo de ida había terminado 2-2 en Francia, y con ese resultado, los Red Devils necesitaban una victoria en casa para avanzar. Lo lograron en un encuentro que fue una auténtica montaña rusa de emociones y que dejó al Lyon eliminado tras haber acariciado la clasificación.
Desde el inicio, el United mostró intensidad y presión alta. Esa actitud rindió frutos rápidamente, cuando el uruguayo Manuel Ugarte abrió el marcador al minuto 10 tras una jugada colectiva que culminó con una asistencia del argentino Alejandro Garnacho.

A pesar del golpe, el Lyon respondió con personalidad y generó varias oportunidades que obligaron al arquero André Onana a intervenir con solvencia. Sin embargo, justo antes del descanso, Diogo Dalot aumentó la ventaja local con un disparo cruzado raso que puso el 2-0 al minuto 45+1.
Tras el descanso, el United retrocedió líneas para proteger su ventaja, mientras el Lyon buscaba con insistencia el empate. Esa presión se tradujo en dos goles en apenas siete minutos. Corentin Tolisso marcó de cabeza al minuto 71 y Nicolás Tagliafico igualó el global 4-4 con un gol de rebote en el 78.

El partido se fue a la prórroga, donde el Lyon parecía haber sentenciado la serie con dos tantos de Rayan Cherki y Alexandre Lacazette, lo que colocó el marcador 4-2 momentáneamente y dejó al United contra las cuerdas.
Pero cuando todo indicaba que el conjunto francés se llevaría la clasificación, el equipo inglés protagonizó una remontada histórica. Bruno Fernandes recortó distancias al minuto 114, y luego llegó la locura total: Mainoo igualó la serie al 120 y, apenas segundos después, Maguire selló la victoria con un cabezazo en el 121 que desató la euforia en las gradas.

Con esta victoria, el Manchester United avanza a las semifinales, donde se enfrentará al Athletic Club. El último encuentro entre ambos clubes en competición europea fue en la temporada 2011-2012, cuando los españoles, entonces dirigidos por Marcelo Bielsa, eliminaron al equipo inglés que contaba con Sir Alex Ferguson en el banquillo.
En una temporada irregular en la Premier League, este triunfo representa una oportunidad para salvar el año con un título continental que añadiría un capítulo más a la rica historia europea del club.